¿Cómo cuidar una chinchilla como mascota?
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La chinchilla es una de las mascotas más demandadas en la actualidad en los hogares españoles. Se trata de un roedor que puede alcanzar los 800 gramos de peso cuya alimentación es herbívora. Las patas traseras tienen un diseño amorfo de apenas tres dedos. Su esperanza de vida oscila entre los 12 y los 15 años, aunque algunos ejemplares han vivido hasta 25 años.
Su origen se encuentra en la zona sur de la Cordillera de los Andes, y los científicos creen que viven en la Tierra desde hace 50 millones de años. En estado silvestre parece no beber agua, pero esto se debe a que obtienen la cantidad que necesitan a través del rocío. Por lo tanto, en cautividad, siempre hay que proporcionarle agua limpia y fresca.
Hay algo muy curioso sobre la chinchilla, y es que es el animal terrestre con el pelaje más espeso. El espeso pelaje tiene que ver con su lugar de origen, a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar, en áreas desérticas y frías. Se cae con mucha facilidad, así que le resulta sencillo escapar de las garras de sus depredadores.
Cuidados de la chinchilla como mascota
Si por algo es bien conocida la chinchilla es por ser muy independiente, aunque también necesita socializar. Es conveniente buscarle un compañero porque a la chinchilla no le gusta vivir sola. Por lo tanto, lo mejor es tener dos chinchillas jóvenes desde el principio.
Lo más importante es que cuente con un espacio adecuado. La jaula tiene que ser amplia y contar con varios niveles. Ahora bien, hay que abrir la puerta al menos una vez al día para que corretee por la casa libremente.
La limpieza de la jaula debes hacerla a diario, para eliminar el heno sucio y toda la suciedad acumulada en la base. También tienes que lavar a tu mascota todos los días.
A la hora de cogerla, ten cuidado porque es un animal inquieto y nervioso, pero al mismo tiempo muy delicado. Sujeta a la chinchilla con firmeza, pero sin hacer presión.
En lo que respecta a la alimentación, se basa casi en exclusiva en vegetales. Su comida favorita es el heno, aunque también come alfalfa.
Otro de los cuidados básicos es colocar una rueda de ejercicios en la jaula, ya que es un animal muy activo que necesita ejercitarse a diario. También puedes dejarle que juegue fuera de la jaula bajo supervisión.
Y, por último, en lo que respecta a la salud, a partir de los 10 años la chinchilla puede sufrir alguna que otra complicación en su aparato digestivo.
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