¿Se puede hacer una barbacoa en una terraza?
La barbacoa es perfecta para disfrutar del tiempo entre amigos
Llega el buen tiempo y las barbacoas se convierten en grandes protagonistas para reuniones con amigos, y aunque lo ideal es tener un jardín para poder hacerla, no es el único espacio en el que puedes prepararla. Hoy hablamos de la posibilidad de hacer una barbacoa en una terraza, una opción que sería muy interesante si no tienes un patio, jardín o cualquier otro espacio exterior de mayor tamaño.
La cocina a la parrilla es buenísima, está claro que no suele ser tan saludable, más aún en una barbacoa entre amigos que se llena de carnes y embutidos de todo tipo, pero de vez en cuando no pasa nada por disfrutarla.
¿Es posible hacer una barbacoa en una terraza?
Lo cierto es que sí, en una terraza se puede preparar una barbacoa perfectamente, aunque esta afirmación tiene matices. Actualmente no hay una regulación municipal que impida barbacoas en terrazas, por lo que debe ser cada comunidad de propietarios la que determine si se puede hacer o no.
Aunque no haya en los estatutos de la comunidad información específica al respecto, en el artículo 7.2 de la Ley de Propiedad Horizontal que afecta a las comunidades se señala que “al propietario y al ocupante del piso o local no les está permitido desarrollar en él o en el resto del inmueble actividades prohibidas en los estatutos, que resulten dañosas para la finca o que contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas”.
Esto significa que si la haces, y algún vecino se queja, lo que probablemente sucederá por el olor, la comunidad te prohibirá volver a hacerla. Será el presidente de la comunidad el que deba pedirte que no las hagas, ya sea porque resultan molestos los olores o porque se puede considerar peligroso. Si te niegas y la vuelves a hacer, es posible que haya una junta vecinal para incluir en los estatutos la prohibición expresa de hacer una barbacoa en una terraza, azotea o balcón de la comunidad.
Quizás tengas suerte y nadie se queje, por lo que podrías seguir haciéndolas, aunque eso daría pie a que todos los vecinos hicieran lo mismo, y al final acabaría siendo problemático hacerla.
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