La prensa argentina arde tras el escándalo del fútbol olímpico: «Mano negra, mamarracho»

La prensa argentina estalló y con razón tras lo vivido este miércoles en el estadio Geoffrey-Guichard de Saint-Étienne. El primer partido de la fase de grupos del torneo de fútbol masculino de los Juegos Olímpicos entre Marruecos y Argentina estuvo detenido dos horas y a la reanudación el árbitro había invalidado el gol del empate de Cristian Medina en la última jugada tras 14 minutos de descuento.

El enfado era máximo y Argentina se marchó de vacío después de un acontecimiento inédito desde la existencia del VAR. Es por eso que en el país albiceleste hoy hablan de «drama» y «escándalo» para definir lo ocurrido en Francia. Estos calificativos los emplea en un artículo post partido el diario Clarín, pero las portadas de este jueves son todavía más llamativas.

El periódico El Hincha habla directamente de «mano negra». Así se titula su portada en la que la única imagen que se observa es la de Nicolas Otamendi reclamando al árbitro sueco Glenn Nyberg, que ya pitó a España en la Eurocopa de Alemania. «El inicio de París 2024 fue con bochorno», inicia su entradilla este diario en su versión a papel.

Y si nos vamos a otra cabecera, como el diario Hoy, esta titula «papelón olímpico» para expresar lo que pasó en el Marruecos-Argentina. «El combinado nacional había logrado un heroico empate gracias al tanto de Medina. El partido fue interrumpido por la invasión de hinchas marroquíes. Y dos horas después de la interrupción, el árbitro anuló el 2-2 por fuera de juego y permitió jugar tres minutos más de yapa», aclaran.

La Capital, decano de la prensa argentina, abre su edición de este jueves con «escándalo olímpico», recordando la declaración del seleccionador Javier Mascherano: «Nos tomaron el pelo». No era para menos, y es que hasta Leo Messi reaccionó en sus redes sociales a lo que acababa de pasar, calificándolo de «insólito».

La prensa argentina clama contra el arbitraje

Este Marruecos-Argentina pasará a la historia de este deporte. Ocurrió algo jamás visto en un terreno de juego. El encuentro acabó –o eso se creía, hasta la organización lo creyó– con un resultado de 2-2 con un gol de Medina en el minuto 106. Sin embargo, dos horas después, cuando ya todos se habían ido del estadio de Saint-Étienne, el árbitro señaló a las dos selecciones que ese partido no se había acabado, que lo que había pasado es que lo había parado por graves incidentes. Aficionados de Marruecos lanzaron un petardo a los futbolistas argentinos y el encuentro se suspendió por ese motivo.

Dos horas después de esos incidentes, a raíz del gol argentino en el minuto 106 –también saltaron hinchas marroquíes al campo–, se reanudó el partido… ¡Con la anulación en el VAR de ese gol de Argentina! Fue una escena insólita. Con un campo totalmente vacío, el choque volvió a jugarse con una revisión del VAR de ese gol. Y se dieron cuenta de que en esa jugada había fuera de juego, por lo que se anuló el tanto argentino y el partido quedó 1-2. Se jugaron tres minutos más, tiempo en el que no se movió el marcador.