La ANC centrará la campaña del ‘sí’ a la independencia en los castellanoparlantes e inmigrantes
Los castellanoparlantes, los trabajadores del cinturón rojo de Barcelona y los inmigrantes extranjeros son el objetivo prioritario de la campaña que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) desarrollará para captar votos a favor de la independencia en el referéndum que el presidente Carles Puigdemont quiere celebrar en otoño.
La ANC centrará esta campaña en 53 «zonas prioritarias» de Cataluña que hoy son reticentes a apoyar la independencia, pero que «podrían decantar el resultado» a favor del Sí mediante una adecuada operación de marketing.
Entre estas zonas se encuentran ocho distritos de Barcelona (Ciutat Vella, la Barceloneta, Nou Barris, Sant Andreu, Poble Sec, Sants-Montjuïc, Sant martí y Horta-Guinardó) y numerosas ciudades del cinturón industrial que tradicionalmente votaban al PSC, como Viladecans, Sabadell, Rubí, Sant Adrià de Besòs, Sant Boi de Llobregat, Badalona o Santa Coloma de Gramanet.
Jubilados, funcionarios y autónomos
El informe de gestión que la ANC aprobará en su asamblea general del próximo día 29 especifica que la campaña a favor de la independencia debe centrarse en «todo el colectivo de jubilados, funcionarios, autónomos, emigrantes e inmigrantes con dudas y miedos sobre el futuro de la República catalana».
Se trata de colectivos que la asociación que preside Jordi Sánchez considera hostiles a sus tesis, pero que podrían cambiar de opinión si se les convence de que una hipotética Cataluña independiente podrá cubrir todas sus carencias y necesidades.
Además de ellos, la ANC intentará también captar a favor del sí a «los votantes soberanistas de Catalunya Sí que es Pot [la marca blanca de Podemos liderada por Ada Colau y Xavier Domènech] y votantes no independentistas de Junts pel Sí», entre los que menciona a los antiguos votantes de UDC, el partido de Josep Antoni Duran Lleida.
Para hacer llegar su mensaje a estas franjas de población, la asociación independentista recurrirá al «activismo de calle»: voluntarios que van puerta por puerta vendiendo a los residentes las virtudes del proyecto soberanista.
La «ilusión de construir un país nuevo»
Según el documento que se someterá a votación el próximo día 29, estos activistas han sido formados para utilizar «técnicas básicas de venta, seducción y comunicación» para persuadir a sus interlocutores. Las mismas técnicas que utilizan los comerciales que ofrecen sus productos a domicilio.
En esta labor, afirma la ANC, los voluntarios deben mantener una «actitud de humildad y empatía ante su interlocutor. No se trata de querer ganar la conversación, sino de escuchar los argumentos de nuestros interlocutores para poder darles información y elementos de debate para generar dudas».
Y sobre todo, añade, deben «transmitir la ilusión de construir un país nuevo entre todos, una Cataluña como tierra de acogida y oportunidades, en contraposición con la tierra de la que tuvieron que marchar ellos o sus antepasados». Un mensaje que va especialmente dirigido a los castellanoparlantes e inmigrantes que residen en Cataluña.
De este modo, la ANC mantiene la ficción de que el próximo otoño se celebrará un referéndum que dará paso a la inmediata proclamación de la independencia de Cataluña, en caso de que gane el Sí.
Juego sucio entre ERC y PDeCAT
Pero en la Generalitat que preside Carles Puigdemont no las tienen todas consigo, especialmente después de que la Justicia haya inhabilitado (aunque con penas extraordinariamente leves, eso sí) a Artur Mas y Francesc Homs por convocar el referéndum ilegal del 9N.
Para evitar ser también inhabilitado, el líder de ERC Oriol Junqueras se ha negado a impartir por escrito las órdenes para comprar las urnas. Por su parte, en una conversación grabada sin su consentimiento, el coordinador de organización del PDeCAT, David Bonvehí, reconoce que su partido planea convocar elecciones anticipadas y presentar a un candidato «autonomista» si fracasa el proceso. El PDeCAT sospecha que la grabación ha sido filtrada por sus socios de gobierno de ERC.