Pasajeras de Qatar Airways denuncian haber sido sometidas a exámenes vaginales en el aeropuerto de Qatar
El 2 de octubre apareció un bebé recién nacido en el Aeropuerto Internacional Hamad en Qatar. El protocolo de las autoridades del aeropuerto fue retrasar los vuelos y realizar exámenes vaginales a todas las mujeres que se encontraran en las inmediaciones para identificar a la madre.
Ese mismo día estaba programado el vuelo QR 908 a Sídney, que se retrasó más de cuatro horas después de que las autoridades paralizasen el despegue para inspeccionar ginecológicamente a las mujeres del vuelo. Muchas de las mujeres intentaron negarse y quedaron traumatizadas, trece de las pasajeras eran australianas.
Australia ha confirmado este lunes la protesta ante el Gobierno de Qatar por el “trato ofensivo dado a un grupo de mujeres que fueron sometidas a exámenes ginecológicos antes de abordar un avión hacia Sídney”, reza el comunicado gubernamental.
El canal 7 de la televisión australiana informó el domingo de que las mujeres, entre ellas 13 australianas, fueron detenidas y llevadas a una ambulancia aparcada en la pista. Allí fueron obligadas a sacarse la ropa interior para presuntamente someterse a exámenes ginecológicos sin su consentimiento y sin ser informadas del hallazgo del recién nacido.
El Correo del Golfo confirma estas informaciones y añade que un médico en el vuelo le dijo a Guardian Australia que las mujeres regresaron un tiempo después y que «la mayoría de ellas estaban muy molestas». El doctor Wolfgang Babeck aclaró que «al menos una de ellas estaba llorando, estaban discutiendo lo que había sucedido y diciendo que era inaceptable y repugnante».
Al parecer, durante la retención, fueron presentadas a una doctora y básicamente las registraron al desnudo y tuvieron que quitarse todo. “Toda la ropa, incluso la ropa interior», agregó el Correo del Golfo. La médica intentó palpar el útero y el área del estómago o la parte inferior del abdomen para ver si habían dado a luz recientemente, así lo relataron las afectadas a los medios de comunicación australianos.
Habían encontrado un bebé en el baño y estaban tratando de averiguar quién era la madre. Además de las 13 mujeres australianas a bordo del Qatar Airways a Sídney otros vuelos también se vieron afectados.
La ministra australiana de Exteriores, Marise Payne, dijo que el Gobierno de su país ha «tratado directamente con las autoridades de Qatar» sobre este «conjunto de incidentes, muy perturbadores, ofensivos y preocupantes».
La ministra Payne también aclaró que está a la espera de los resultados de las investigaciones realizadas tanto por las autoridades de Qatar como Australia sobre los hechos denunciados, sin dar detalles sobre el número de pasajeras afectadas o el rango de edades, ni tampoco sobre el tipo de exámenes médicos a los que fueron sometidas.
El aeropuerto qatarí confirmó que el bebé se encuentra a salvo y bajo el cuidado de médicos y trabajadores sociales, mientras que la madre no ha sido identificada y se encuentra en paradero desconocido, según citó la ABC.