Hunter Biden, hijo del presidente de EEUU, condenado por comprar un arma ocultando que consumía drogas

Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, ha sido declarado culpable este martes de tres cargos de delito grave, relacionados con la compra ilegal de un revólver en 2018, al ocultar en un formulario obligatorio en este tipo de adquisiciones que consumía drogas.

El jurado ha determinado por unanimidad que cuando Hunter Biden, de 54 años, compró un revólver Colt Cobra calibre 38 en octubre de 2018, mintió en el formulario federal al marcar la casilla de que no era adicto ni consumía drogas en ese momento.

El hijo de Joe Biden no ha conseguido convencer a los miembros del jurado de su inocencia después de haber escuchado su relato sobre su lucha para mantenerse sobrio. Ahora se enfrenta a una pena de hasta 25 años entre rejas, aunque es probable que la pena de prisión que se le imponga suponga una fracción de esa condena máxima.

Esta condena y la posibilidad de ir a la cárcel se meterán en plena campaña presidencial en Estados Unidos. Su padre se enfrentará en noviembre a Donald Trump, candidato republicano, el cual también ha sido declarado culpable por ordenar falsear los libros de contabilidad para cubrir un soborno a la actriz porno Stormy Daniels, con la que tuvo una relación fuera del matrimonio en 2006.

En el caso del juicio al hijo del presidente de Estados Unidos, se han revelado detalles sobre la familia Biden, que pueden complicar sus opciones ante el voto más conservador de Estados Unidos. Durante el juicio, se ha tratado que consumió crack, sus vídeos con prostitutas y su affair con la viuda de su hermano Beau Biden, Hallie, poco después de su muerte.

En septiembre, Hunter Biden se enfrenta a otro juicio por cargos fiscales en Los Ángeles (California), en el que se abordarán de nuevo detalles sobre su estilo de vida con prostitutas, locales de masajes y adicción a las drogas.

Biden no indultará a su hijo

El presidente Joe Biden ha afirmado que no indultará a su hijo, que se enfrenta a 25 años de cárcel. En cambio, Joe Biden sí ha querido manifestar su apoyo al destacar que se siente muy orgulloso de que Hunter Biden haya dejado atrás su adicción a las drogas y las prostitutas. En su comunicado, Joe Biden ha destacado que «estoy muy orgulloso del hombre que Hunter Biden es ahora».

Después de que el jurado haya declarado culpable a Hunter Biden, el presidente de Estados Unidos ha indicado que «como dije la semana pasada, soy el presidente, pero también soy padre. Jill y yo queremos a nuestro hijo y estamos muy orgullosos del hombre que es hoy. Muchas familias que han tenido seres queridos que han luchado contra la adicción comprenden el sentimiento de orgullo de ver a un ser querido salir del otro lado y ser tan fuerte y resistente en su recuperación», ha destacado Joe Biden.

«Como también dije la semana pasada, aceptaré el resultado de este caso y seguiré respetando el proceso judicial mientras Hunter estudia una apelación», ha añadido el presidente, en referencia a que no va a indultar a su hijo. «Jill y yo siempre estaremos ahí para Hunter y el resto de nuestra familia con nuestro amor y apoyo. Nada cambiará eso jamás», ha indicado.

Los escándalos del hijo del presidente

Además de los cargos que se le imputan al hijo del presidente de Estados Unidos, se han marcado en rojo estos días los mensajes que se han encontrado en su ordenador portátil en el centro de esta saga política que se ha prolongado durante un año de duración.

En su ordenador, se han guardado mensajes en los que se han podido leer conversaciones y vídeos con prostitutas en los que explica que va a comprar drogas, pruebas que se han utilizado en el juicio de Delaware y además pueden perjudicar, como se ha indicado con antelación, sus opciones ante el voto conservador de Estados Unidos en las elecciones presidenciales.

Son 217 gigabytes de datos personales con vídeos en los que tiene sexo, vídeos en los que fuma crack, selfies con los ojos desorbitados, sus extractos bancarios de entradas y salidas de dinero de sus negocios con China y Ucrania, entre otros países, sus transacciones de Venmo, sus correos electrónicos de trabajo, insultos a familiares, los análisis de su psiquiatra, sus búsquedas porno, su número de la Seguridad Social, fotos de mujeres desnudas, fotos de sus hijos y su padre. En realidad, eran tres ordenadores. Uno estaba destrozado. Otro fue fácil de arreglar. Un tercero estaba con el teclado lleno de restos de alcohol. Entre el contenido más alarmante, el cual no se ha podido verificar de manera independiente, han sido sus conversaciones desnudo, a través de una videocámara, con adolescentes posiblemente menores de edad.

Secretos de Estado. En el juicio, los testigos también han abordado los negocios de Hunter Biden durante los viajes de su padre y los fiscales intentarán tratar las cuestiones de sus tratos con China y Ucrania, cuando estuvo trabajando con Burisma, y su minuta de 10 millones de dólares que le cobraba a un empresario de China para introducirle en los círculos de Washington y en cenas. ¿Qué información manejaba? Durante sus encuentros con empresarios chinos, Hunter mencionaba posible acceso a información y contacto con el «big guy», (gran hombre, en español) en referencia a su padre.