Bélgica no detuvo a Salah Abdeslam porque sus leyes impiden intervenciones por la noche
El considerado ‘cerebro’ de los atentados de París, Salah Abdeslam, fue encontrado en Molenbeek la madrugada del domingo 16 de noviembre. La policía no lo detuvo porque la ley belga impide operaciones desde las once de la noche hasta las cinco de la mañana.
Según publican distintos medios del país, los investigadores apuntan a que el terrorista decidió no detonar el cinturón de explosivos, como sí hizo su hermano, y huir tras llamar por teléfono a dos amigos que acudieron a recogerlo la misma noche de la matanza desde Bruselas.
A las 09:00 horas de ese sábado, el cabecilla y esos dos hombres fueron identificados en un control fronterizo, pero lograron superarlo porque en ese momento ninguno de ellos estaba en busca y captura. Desde entonces y hasta ahora no ha habido ninguna novedad sobre el paradero.
La revelación principal, que el yihadista pudo haber sido arrestado, es una confesión del propio ministro de Justicia, Koen Geens, a la cadena de televisión VTM. Los agentes tuvieron que esperar a que terminara ese periodo de tregua y al concluir, el sospechoso se había escapado.