‘First Dates’: María, en shock al descubrir que su cita no acude al programa por voluntad propia

Como cada noche, una nueva tanda de solteros ha acudido a First Dates a encontrar a su pareja ideal. Uno de los comensales ha realizado un comentario que de primeras ha echado atrás a su cita.

La primera en llegar al restaurante ha sido María. Le apasiona ser psicóloga aunque ahora no está en una clínica, sino en el departamento de recursos humanos de una empresa. Aún así afirma estar aprendiendo mucho. Es una experta en encontrar “red flags” en los chicos a los que conoce, pero suele ignorarlas.

Su cita ha sido Luciano, un streamer que ha contado que conduce un programa llamado Twitch Dates en internet y que tiene el mismo objetivo que First Dates. Al ver a la chica con la que iba a cenar esa noche ha sentido que el programa se había equivocado porque era demasiado guapa para él. Es de origen argentino, pero lleva toda la vida viviendo en Málaga. Ella por su parte le ha contado que era colombiana, algo que le ha gustado mucho y que ha dado pie a que fluyera la conversación.

Masajes por todo el cuerpo y un secreto ❤️

Todo listo para poner en marcha la máquina del amor en #FirstDates3F. ¡Nos vemos en una hora! pic.twitter.com/dnYcUte7kQ

— First Dates (@firstdates_tv) February 3, 2023

Ya en la mesa María ha querido saber cuál era la profesión del malagueño de adopción. Él ha contado que es ingeniero aunque ahora mismo se dedica a la publicidad y las redes sociales. También le apasionan los videojuegos y salir de fiesta. La chica ha confesado que no sabe quién es Ibai Llanos y que desconoce ese mundo, pero le ha parecido interesante.

Ambos han coincidido al hablar sobre qué era lo que esperaban encontrar allí esa noche y respecto a lo que buscaban en el amor. Luciano ha revelado entonces que no había sido él el que había mandado el formulario para presentarse allí esa noche y que habían sido sus amigos a modo de venganza por el programa que él hacía online de citas. A la chica le había gustado mucho el argentino, pero al conocer este dato se ha sentido decepcionada: “Eso me ha echado para atrás”, confesaba a las cámaras del programa.

Al final ha salido el tema de lo sexual y el arquitecto ha afirmado que lejos de fantasías sexuales sus mayores placeres eran comer y dormir y luego ya no estaba seguro si decantarse por beber o el sexo. A la psicóloga esto le ha hecho gracia, aunque no estaba segura de creérselo del todo. En la decisión final los dos han dicho que sí a tener una segunda cita y ella ha recalcado que esta vez sería alejados de las cámaras y de cualquier programa de televisión.