Valls da en Barcelona el primer paso del plan Sánchez-Macron: empujar a C’s a un pacto con el PSOE
Manuel Valls ha ofrecido su apoyo a un acuerdo de Ada Colau con el PSC para impedir que el separatista Ernest Maragall (ERC) se haga con la Alcaldía de Barcelona. El acuerdo forma parte del plan de alianzas trazado por Pedro Sánchez con Macron en la cena de este pasado lunes en París, justo después de comprobar los resultados de las elecciones europeas y de las autonómicas y municipales.
El acuerdo exige un acercamiento paulatino de Ciudadanos a un posible acuerdo de Gobierno nacional con el PSOE y cuenta con un punto clave: impedir que el partido de Albert Rivera pacte con Vox precisamente para forzarle a virar hacia el PSOE si quiere tener cuota de poder. A partir de ahí, el plan incluye un reparto de poder entre el PSOE y Ciudadanos.
Pero el plan no es pacífico ni siquiera dentro del propio partido de Rivera. El líder naranja ya había tomado su decisión de intentar quedarse con el centroderecha intentando ocupar el hueco del PP y ahora las indicaciones que llegan desde París van justo en la dirección contraria. Por eso Ciudadanos se acaba de desmarcar del propio Valls y ha señalado que ellos tan sólo quieren apoyar al candidato socialista Collboni.
El comunicado oficial de Ciudadanos muestra estas fuertes discrepancias con Valls. “Si hubiera que impedir que haya un alcalde independentista o populista los concejales de Cs negociarían con un candidato que no sea ni independentista ni populista. A pesar de las diferencias que hay con la candidatura socialista, la opción que reúne esas condiciones es Collboni”, señala el comunicado del partido de Rivera.
“Cs está dispuesto a negociar con condiciones con el Sr. Collboni para que la ciudad de Barcelona sea una ciudad abierta y constitucionalista”, pero nunca para ayudar a a ser alcaldesa a Colau, añade la nota oficial.
Unos postulados que distan mucho del ofrecimiento de Valls. Porque lo cierto es que la única forma de que Collboni sea alcalde sería con el apoyo de Colau. Traducido: la opción de Valls permite gobernar a Colau, pero la de Ciudadanos no permite gobernar a Collboni.
El pacto Macron-Sánchez
Pero es que muchas cosas han cambiado en una semana. Para empezar el supuestamente débil PP ha resultado ser más resistente de lo esperado -ha recuperado el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid- y ha logrado 20.000 concejales en toda España. Para continuar Macron -líder del partido hegemónico del Grupo Liberal ALDE en Europa- necesita un aliado para batir a los conservadores en el Parlamento Europeo. Y ese aliado puede ser Pedro Sánchez, que tras ganar las europeas en España es igualmente el líder del partido hegemónico del Grupo Socialista y que, de nuevo en igualdad con Macron, necesita una alianza en Europa para arrinconar a los conservadores europeos.
Y todo eso es lo que se habló en la cena de Sánchez con Macron el pasado lunes. Una cena en la que no estuvo Albert Rivera, obviamente.
Todo este entramado de alianzas es el que ha llevado a Valls a acercarse ya a postulados conjuntos con el PSOE, postulados en los que puede caber de forma colateral la populista Colau pero donde Macron no quiere que aparezca Vox, tal y como planteó junto con Sánchez en la famosa cena: crear un pacto contra la extrema derecha, donde ambos meten a Vox en España.
Acuerdo PSOE-C’s
El colofón de este plan, como ya ha publicado OKDIARIO, pasa por otro compromiso arrancado por Sánchez a Macron en esa cena: la promesa de Macron de empujar a Ciudadanos a un acuerdo nacional con el PSOE para formar Gobierno en La Moncloa y, como moneda de pago, entrar en un reparto de poder territorial entre ambas formaciones.
Y dentro de ese compromiso de Macron se encuentra, incluso, el ofrecimiento del presidente francés de echar a Ciudadanos del Grupo Liberal Alde Europeo a los naranjas si insisten en pactar con Vox en regiones o ayuntamientos. Porque la idea es forzar a Ciudadanos a aceptar el pacto con Sánchez ante la evidencia de que sin Vox no pueden mandar en muchas plazas.