Valls advierte que «no se puede sucumbir al chantaje» de quienes pretenden paralizar la ciudad
El exprimer ministro francés y candidato a la Alcaldía de Barcelona, Manuel Valls, ha advertido este miércoles de que la ciudad "no puede sucumbir a ningún chantaje de los que quieren paralizar la ciudad, nunca y en ninguna circunstancia", ha dicho en referencia al conflicto entre taxis y vehículos de alquiler con conductor (VTC).
Ha defendido que los políticos deben ser valientes y plantar cara, sin «pasar la patata caliente», ha aseverado en una conferencia y coloquio en el Círculo Ecuestre, ante asistentes que han elogiado sus propuestas y le han expresado su apoyo de cara a las municipales.
Valls, que concurre con el apoyo de Cs, ha criticado que la alcaldesa, Ada Colau, engañó a los taxistas al prometer una regulación que no podía cumplir por falta de competencias del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) en verano, y ha apostado por que el sector de las VTC se regule con una normativa de ámbito estatal.
Ha dicho que la solución propuesta por el Govern este martes es una solución que acaba con un sector que emplea a mucha gente, según él: «Si soy presidente del AMB y alcalde, no propondré nunca soluciones que van contra el interés general y la ley europea, nacional o catalana» ni aceptará que la ciudad se quede paralizada.
Ha avisado de que el independentismo se está preparando para «asaltar Barcelona» pese a sus divisiones, y ha sostenido que las elecciones municipales irán de escoger entre tres modelos de ciudad: el suyo, el de Colau y el de los independentistas, que al final será el mismo, según él, que no se ha referido al anuncio del exconseller encarcelado Joaquim Forn de liderar una candidatura.
Ha sostenido que la administración de Colau ha sido un desastre, y ha dicho que a un desbarajuste de gestión de un Gobierno municipal populista se suma la integración de Barcelona en el proyecto separatista, según él: «Ha hecho muchos equilibrios para intentar disimular esta opción tan peligrosa para la ciudad».
Valls -que ha celebrado que Lliures apoye su candidatura- ha dicho que se debe reconocer la capacidad de Colau de «decir y defender una cosa y la contraria, pero ha roto con la tradicional postura institucional del Ayuntamiento y ha introducido en la gestión un componente de frivolidad impropio».
Ha resaltado que los vendedores de ‘top manta’ son «pobre gente» tras la que se esconden mafias, y que se debe combatir esta práctica porque es ilegal, al igual que las ocupaciones de inmuebles, que pueden afectar a personas humildes que vuelven a su vivienda, está ocupada y no puede hacer nada, ha dicho.
«Como alcalde, acabaré con el ‘top manta», ha garantizado Valls, que ha asegurado que, si gobierna, habrá normas claras y la Guardia Urbana sabrá que puede actuar y no ser después castigada por el Ayuntamiento, según el candidato, que, preguntado por infraestructuras, ha apostado por acabar la L9 de Metro y ha dicho que unir el tranvía no es una prioridad.
Valls ha defendido la importancia de las élites para la ciudad, y ha avisado de que ir contra las élites es ir en contra de la democracia, tras lo que ha aseverado: «Soy proempresa. Sí, señora Colau, porque es la que crea empleo» y ha asegurado que, si es alcalde, hará un discurso ‘business friendly’ para tratar de que vuelvan el máximo de empresas a la ciudad.