La UE recoge en su plan energético la vía nuclear que Sánchez rechaza mientras castiga al comercio

El Gobierno ha cargado sus primeras medidas de «ahorro energético», principalmente, en los comerciantes y hosteleros, obligados a ajustar la temperatura del aire acondicionado y la calefacción y a apagar los escaparates de sus establecimientos. Las medidas, como reveló OKDIARIO, no han sido exigidas por la Comisión Europea, que da plena libertad a los Estados miembros para decidir las propuestas que consideren más oportunas. Sin embargo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha optado por imponer ya por decreto el plan más severo de la Unión Europea, mientras prepara las nuevas restricciones que debe enviar a Bruselas en septiembre. Y ello, mientras sigue sin contemplar una de las soluciones más solventes, las centrales nucleares, que sí aparecen sin embargo en el plan de ahorro de la Comisión Europea.

El documento en el que se recogen las bases de Bruselas para el ahorro energético es Ahorra gas para un invierno seguro, difundido por la Comisión Europea el pasado 20 de julio. En el texto se destaca que en los análisis sobre la preparación ante un corte de suministro por parte de Rusia se debe tener en cuenta «la disponibilidad de las plantas nucleares». Igualmente, la comunicación apunta que «algunos Estados miembros han pospuesto la eliminación progresiva de las centrales».

En el Plan para poner fin a la dependencia de la UE con respecto a los combustibles fósiles rusos, REPowerEU, presentado en mayo, se recoge también que «algunas de las capacidades existentes relacionadas con el carbón también podrían utilizarse más tiempo de lo previsto inicialmente, así como la energía nuclear y los recursos de gas nacionales» para lograr el abandono de los combustibles fósiles rusos.

Hace unos días, el presidente de la Sociedad Nuclear Española, Héctor Dominguis, ya criticó que España sea el «único país» de la Unión Europea con generación nuclear que «no está revisando, ni planteándose revisar, su programa para ampliar la vida de sus reactores».

Al respecto, Dominguis señaló que Francia y el Reino Unido tienen planes para levantar reactores, Holanda acaba de anunciar la construcción de dos nuevos, Bélgica ha cambiado su decisión inicial y va a mantenerlos operativos más tiempo y Alemania se está replanteando mantener los tres que tiene.

Y cabe recordar, asimismo, que a principios de julio el Parlamento Europeo aprobó incluir la energía nuclear en la clasificación del reglamento de taxonomía que establece qué inversiones pueden considerarse como sostenibles o verdes.

Pedro Sánchez siempre se ha opuesto a esa catalogación. El socialista ha llegado incluso a afirmar que la energía nuclear no es una energía ni «segura», ni «barata» si bien tuvo después que aclarar esas palabras para afirmar que en España se vela por la seguridad de los reactores.

Propuesta del PP

El Partido Popular, en su propuesta energética, sí contempla esta vía. Así, el partido de Alberto Núñez Feijóo propone impulsar un nuevo calendario de cierre alargando la vida útil de las cinco centrales nucleares operativas con sus siete reactores que, recuerda, representan alrededor del 20% de la generación eléctrica en España.

Mientras tanto, como ha publicado OKDIARIO, el Gobierno avanza en el diseño de nuevas restricciones de cara a septiembre, cuando deberá remitir un plan de contingencia a Bruselas. El decretazo ahora aprobado no hace mención alguna a ese plan que elabora el Ejecutivo y tan sólo se limita a señalar que las medidas actuales «podrán complementarse» con otras «adicionales». Para ello, el Ministerio para la Transición Ecológica ha encargado a las comunidades autónomas que le remitan sus propuestas hasta el próximo 31 de agosto.

No se prevé, no obstante, imponer restricciones a los ciudadanos, aunque sí se desplegará una amplia labor de concienciación para el ahorro energético, con medidas para el día a día. Como ha ido avanzando este periódico, entre ellas se incluye una limitación de la velocidad a 100 kilómetros/hora. También hay recomendaciones específicas para bares y restaurantes, como una reducción en el consumo de agua o la instalación de placas solares.