Torra improvisa el despliegue de los Mossos: llaman a los que están librando a tres días del 21-D
La falta de coordinación y la ausencia de órdenes precisas ante el Consejo de Ministros en Barcelona es, opinan desde los Mossos, "inédita"
El dispositivo previsto sería de 8.000 efectivos de los Mossos
Los policías del 21-D exigen a Interior cascos con cámaras para evitar la manipulación del separatismo
El despliegue de los Mossos d’Esquadra ante la celebración del Consejo de Ministros, este viernes, en Barcelona adolece de previsión. Según ha podido saber OKDIARIO de fuentes de este cuerpo autonómico, el Govern está intentando contactar en las últimas horas con agentes que se encuentran en sus días de descanso para convocarles al dispositivo. Todo, a tres días de la cita.
La falta de coordinación y la ausencia de órdenes precisas a estas alturas de la semana es, opinan estas fuentes, «inédita». En determinados sectores de los Mossos se sugiere además la «mala fe» de la propia cúpula policial para evitar que el despliegue, que, dicen, «tendría que estar perfilado desde hace tiempo», cuente con todas las garantías. El domingo, el presidente catalán, Quim Torra, ya dejó entrever ese extremo, al asegurar que garantizarán tanto la seguridad del Consejo de Ministros «como la libertad de expresión y la libertad de concentración» durante la celebración del Consejo de Ministros.
La pasada semana, y en fuentes policiales, se calculó que el despliegue de los Mossos sería de unos 8.000 efectivos, la mitad de este cuerpo autonómico. A ellos se añadirían, se dijo también entonces, otros 1.000 procedentes de Policía y Guardia Civil.
Pero la realidad es que ni el Gobierno catalán, ni el central, han terminado de ultimar el dispositivo. En fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se asegura que el despliegue por su parte será inferior al previsto, en el entorno de 800 agentes.
El lugar elegido por el Gobierno para la reunión, la Llotja de Mar, en pleno centro de la ciudad, obligará a cortar la movilidad para evitar altercados, y a concentrar los esfuerzos de la Guardia Urbana en un reducido perímetro. Los Mossos advierten sobre el hecho de que centrar todo el dispositivo en Barcelona puede dejar desatendidos otros puntos estratégicos de la comunidad, susceptibles de ser objetivo de acciones radicales.
Doce puntos son objetivo de los radicales
Los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) llevan días convocando a la «batalla» del 21 de diciembre, y a ellos se suma un nuevo grupúsculo, más radical -los ‘Grupos Autónomos de Acciones Rápidas’ (GAAR)- que planean un boicot a la Policía, en vías de transporte y centros de comunicaciones.
Tenim clar que el consell de ministres a Barcelona és una provocació, i per això, no els hi donarem la imatge que volen: la d'extrema normalitat al país.
#21DESBORDEMLOS#TombemElRègim🔨 pic.twitter.com/waSNbWOfsc— CDR Catalunya (@CDRCatOficial) December 18, 2018
A través de su canal de Telegram, los GAAR han difundido un manual de instrucciones para sus ‘militantes’ que, entre otras, incluye «controlar las cámaras de vigilancia» o «crear cortinas de humo» en distintos puntos, para despistar a las fuerzas de seguridad.
Asimismo, se explica el plan de «huída» para escapar de la Policía, instando a «dispersar» el grupo con rapidez por «rutas diferentes» .»Se trata de hacer microacciones con material de fácil colocación y transporte para conseguir los objetivos fijados», afirman. Su objetivo son las vías de comunicación de toda la comunidad, que incluyen también puertos y aeropuertos, además de autopistas. Entre las órdenes figura un mapa de puntos estratégicos, con 12 objetivos prioritarios, como la frontera de La Jonquera, el aeropuerto de Reus y El Prat.
El Gobierno confía en la «lealtad» de los Mossos
Por su parte, desde el Gobierno central se expresa una aparente normalidad. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, manifestó este lunes que confía en la «lealtad» de los Mossos para asegurar la seguridad el próximo viernes.
«Yo estoy absolutamente convencido de que el Consejo de Ministros en Barcelona se desarrollará con la normalidad que precisa y se necesita y que es propia de un Estado de Derecho y en un clima de confianza mutua entre instituciones», destacó.