Sectores del PP desatan la lucha interna y admiten que C’s se ha consolidado como voto útil a escala nacional

Sectores del PP han dado rienda suelta a las críticas internas ante el resultado de las elecciones catalanas. “No sólo es que el PP prácticamente ha desaparecido en Cataluña. Es que los separatistas salen legitimados y, además, Ciudadanos se confirma como voto útil a escala nacional”, señalaba ayer un destacado líder popular mientras iban siendo publicados los resultados del 21-D.

Las llamadas se incrementaban ayer entre cargos del PP a medida que se iba confirmando el aumento conjunto de escaños de los dos grandes partidos separatistas -JxCAT y ERC-. Y, por supuesto, a medida que el PP se iba derritiendo en el recuento de votos.

Las llamadas recordaban una frase. La de la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, hace una semana, cuando afirmó que el Gobierno “lo podía haber hecho mejor” en Cataluña. Una frase que alberga el sentimiento de un sector que achaca la derrota al hecho de haber aplicado de forma excesivamente acelerada las elecciones catalanas y a no haber aplicado un 155 más duro. No se trata de una crítica nueva, pero sí de un mensaje que había permanecido aletargado en espera del resultado del 21-D.

Los mensajes de ayer, de hecho, alertaban de tres temores. El primero de ellos el de que un mantenimiento del golpismo en Cataluña de la mano de un nuevo Govern separatista “puede provocar un deterioro económico mayor del esperado”. Y lo puede hacer en un momento en el que el discurso económico es una de las pocas bazas donde el PP saca ventaja a Ciudadanos.
El segundo de los temores apuntaba precisamente a la vuelta al golpismo. Porque “la nueva Generalitat sale de unas elecciones convocadas y auspiciadas por el Gobierno central, con lo que los resultados de los separatistas, tras la aplicación del 155, salen en el fondo legitimados” a escala catalana.

Y el tercero de los malos augurios señalaba directamente a la consecuencia en la política nacional. Porque las “próximas elecciones generales se van a dirimir en clave de defensa de la unidad de España y Ciudadanos acaba de convertirse en voto útil en esa punto”, apuntaba un diputado del PP.
La disputa no saldrá a la luz por el momento. Pero la pelea está servida entre dos sectores que tendrán difícil pacificarse. Por un lado, el de la Vicepresidencia del Gobierno de Soraya Sáenz de Santamaría. Por otro, el de la Secretaría General del partido de María Dolores de Cospedal.

Una pelea que puede marcar la línea del partido en la antesala de las elecciones municipales y autonómicas. Especialmente cuando en plazas como la Comunidad Valenciana o Baleares, la pugna por el poder regional se va a entrelazar totalmente con el desafío separatista. Y la pelea por los votos entre el PP y Ciudadanos aún más. “El que personalice el discurso constitucionalista será el que saque venta de cara a las nuevas elecciones territoriales”, destacaba ayer un diputado regional del PP.