Nuevo fracaso internacional de Puigdemont en la inauguración de la ‘embajada’ en Copenhague
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha aprovechado la inauguración en Copenhague (Dinamarca) de la delegación del Govern en los países nórdicos, a la que no ha acudido ni una sola autoridad oficial; para criticar al Gobierno central, a quien acusa ofrecer a los catalanes «una autonomía vacía de contenido», mientras que el Govern les ofrece poder decidir su futuro en un referéndum.
Puigdemont ha estado acompañado en el acto del conseller de Exteriores, Raül Romeva, y de Francesca Guardiola, la nueva ‘embajadora’ y hermana del ex entrenador del F.C. Barcelona Pep Guardiola, destacado independentista.
«El 1-O solo hay dos opciones: aceptar el ‘statu quo’ de una autonomía vacía de contenido o declarar la independencia» en una Europa de soberanías compartidas, ha reivindicado Puigdemont.
Aunque ha lamentado que el Gobierno central no haya ofrecido una alternativa al modelo actual a los catalanes, se ha mostrado convencido de que «no bloqueará la votación del 1-O y, si gana el ‘sí’, negociará la mejor manera de implementar los resultados con buena voluntad».
Ha invitado al Estado a «tomar nota» de Canadá, Reino Unido y Dinamarca para favorecer democráticamente la celebración de un referéndum de independencia, y ha asegurado que se trata de una demanda apoyada por «el 80% de los catalanes».
También ha reivindicado que Catalunya está plenamente capacitada para ser un Estado, y ha puesto como ejemplo la respuesta de los Mossos d’Esquadra en los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona): «Estamos dispuestos a asumir nuestras responsabilidades, tanto dentro del país como internacionalmente».
Relación con los países nórdicos
Puigdemont ha ensalzado las relaciones de Catalunya con los países nórdicos y su voluntad de reforzarlas, y ha explicado que los intercambios comerciales son muy importantes como demuestra
que las exportaciones catalanas en Suecia representan el 21,4% del Estado.
Además, hay 31 y 37 filiales de empresas catalanas establecidas en Dinamarca y Suecia, respectivamente, y cada año visitan Catalunya unos 250.000 turistas nórdicos.