El PSOE lleva en su programa abolir la prostitución y perseguir la gestación subrogada

Si bien el partido de Albert Rivera no hace referencia ni a la prostitución ni a la lucha contra la explotación sexual, el PP y Unidas Podemos coinciden al comprometerse a aprobar una Ley Integral contra la Trata de seres humanos.

La promesa de los populares es dar luz verde a una norma que «contemple toda forma de explotación contra mujeres y niñas», además de reforzar «la lucha contra la explotación sexual» en los municipios españoles. Asimismo, da su apoyo «a la cooperación con las entidades que ayudan a rescatar personas de la explotación sexual».

Por su parte, Unidas Podemos promete sacar adelante una ley contra la trata de personas en la que las víctimas «serán consideradas como sujetos de derecho». «La ley asegurará la coordinación de todas las Administraciones, prohibirá la deportación o el encierro de víctimas en los Centros de Internamiento para Extranjeros (CIE) y las eximirá de responsabilidad penal si están en situación administrativa irregular», afirma.

En otro de los puntos del programa incluye medidas para avanzar en la igualdad real, donde menciona el desarrollo de «iniciativas concretas en materia de género con una perspectiva interseccional, incluyendo cuestiones como la economía de los cuidados o la trata de personas».

El PSOE también promete erradicar la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y, en ese mismo apartado, incluye su compromiso de trabajar para «abolir» la prostitución, «favorecer la dignidad de las mujeres, garantizar alternativas y terminar con las redes y las mafias que se lucran con la esclavitud».

Para ello, los socialistas reivindican la aprobación de una ley integral contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y contra la prostitución. «La prostitución, de la que nos hemos declarado abolicionistas, es uno de los rostros más crueles de la feminización de la pobreza, así como una de las peores formas de violencia contra las mujeres», agregan.

Evitar publicidad de contenido sexual

Dicha norma, «contemplará mecanismos adecuados para la prevención y persecución de la trata, evitará la publicidad de servicios de contenido sexual y reforzará los servicios y programas de protección social y recuperación integral» de las víctimas.

De manera más concreta, el PSOE propone medidas legislativas encaminadas a la abolición de la prostitución, entre las que incluye la sanción de la demanda y compra de esta práctica. Asimismo, los socialistas quieren introducir una figura jurídica que «permita sancionar penalmente a quienes contribuyeran o se beneficiaran de la prostitución ajena, lo que contribuirá a desmantelar la industria de la prostitución».

El PSOE ya incluyó la propuesta de sancionar la demanda y compra de prostitución en su programa de 2016. Y aunque en las 110 medidas presentadas recientemente para «construir la España de la próxima década» el PSOE no mencionaba esta posibilidad, si bien, finalmente, la ha incorporado.

Entre las medidas para «perseguir» la trata y explotación sexual, el PSOE, al contrario que el resto de partidos principales, hace una alusión a la pornografía. Concretamente, quiere perseguir la trata y explotación sexual, «especialmente de menores», a los que dice que protegerá «de la creación, difusión y exposición de pornografía».

Asimismo, promete impulsar «una protección reforzada de los menores para evitar el acceso a la pornografía», que esté sujeta a las medidas más estrictas en línea con la nueva normativa audiovisual del Parlamento Europeo. Por su parte, sin hacer alusión a la pornografía, Unidas Podemos defiende una educación afectivo-sexual dentro del sistema educativo, sin dar más detalles.

Gestación subrogada

De los partidos mayoritarios, solo PSOE y Ciudadanos plantean medidas sobre gestación subrogada, aunque diametralmente opuestas. Mientras los socialistas dicen «no a los ‘vientres de alquiler’» y se comprometen a perseguir a las agencias que median entre gestantes extranjeras y familias españolas, C’s promete legalizar esta práctica, que aspira a que sea «altruista» como en Canadá.

Por su parte, Vox, en su programa electoral, se compromete a prohibir los «vientres de alquiler» y «toda actividad que cosifique y utilice como producto de compra venta a los seres humanos».