El PP sobre la ley de incompatibilidades del PSOE: «Se premia a los que no trabajan»

El PP rechaza la intención del PSOE de impedir que los diputados puedan compaginar sus tareas parlamentarias con otro trabajo. En fuentes populares se considera que impedir la compatibilidad acabará provocando «la fuga de políticos valiosos, pero que, si tienen que elegir, se quedarán con su actividad privada».

Ello, dicen, acabará provocando que la política sea ejercida por personas «sin más ocupación que la vida política», algo que «acabará siendo contraproducente».  El PSOE sí acepta, no obstante, que los diputados realicen algunas tareas remuneradas, como conferencias o asistencia a tertulias.

Los socialistas trasladarán este jueves que la Comisión del Estatuto de los Diputados que vote sobre la incompatibilidad que afecta a 120 diputados no lo haga en bloque, sino caso por caso. Los socialistas tienen contabilizados unos 40 casos de diputados que cobran por «actividades paralelas como asesorar a empresas, tener negocios privados, ejercer como abogados, arquitectos o presentadores de televisión», según ha explicado este martes el portavoz de los socialistas en el congreso, Antonio Hernando.

Entre ellos, se encuentra el diputado de Ciudadanos Félix Álvarez, Felisuco, quien ha solicitado poder compatibilizar sus tareas en el Congreso con el trabajo en televisión. También Toni Cantó, que tiene previsto compaginar su trabajo parlamentario con el actoral.

Iglesias acusa al PSOE de ponerle «una mordaza»

Hernando ha sugerido también que esa incompatibilidad afecta al secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, por su trabajo en como presentador en La Tuerka. Preguntado por este asunto, Iglesias ha asegurado que no cobra por ello y ha acusado al PSOE de intentar «censurarle» o ponerle «una mordaza» impidiéndole compaginar ambas actividades. «No es una actitud muy democrática», ha considerado.

El PSOE quiere hacer desfilar uno a uno a los diputados que, consideran, presentan dudas de compatibilidad. De ellos, una veintena pertenecen al PP, siete u ocho, a Unidos Podemos; seis o siete a Ciudadanos, y dos a Esquerra Republicana (ERC), según parlamentarias. La medida afectaría a diputados que quieren mantener abierto su bufete de abogados, a asesores de empresas, a arquitectos que no renuncian a su estudio, a peritos judiciales, y hasta un veterinario que forma parte de la propia comisión.

El PSOE exige una interpretación «radical» del principio de «dedicación absoluta» de los diputados que contempla la Ley Electoral, limitando al mínimo las actividades extraparlamentarias que puedan autorizarse.

La norma actual permite compatibilizar el escaño con la administración del patrimonio personal o familiar y la producción y creación literaria, científica, artística o técnica, pero también permite autorizar otras actividades privadas siempre que no perciban una remuneración pública o menoscaben el trabajo parlamentario.

El PSOE quiere también que los diputados comuniquen a la Comisión del Estatuto del Diputado de cada actividad nueva -distinta de la ya autorizada- que quieran realizar con el fin de que el Congreso tenga actualizadas todas las ocupaciones extra de los diputados.