Dos testigos protegidos confirman ante el juez la información publicada por OKDIARIO
Dos testigos protegidos han afirmado este lunes ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, que investiga los atentados del 17 agosto del año pasado en Barcelona y Cambrils —que dejó 16 víctimas mortales y más de un centenar de heridos—, han revelado datos «importantes» que pueden servir al magistrado para esclarecer la vinculación directa de Driss Oukabir, a cuyo nombre estaba la furgoneta que se utilizó para el atropello masivo en las Ramblas.
Según el primero de los testigos, un vecino de Alcanar (Tarragona), el presunto yihadista que alquiló la furgoneta utilizada para el atropello masivo en las Ramblas también frecuentaba la vivienda de Alcanar (Tarragona) donde se estaba preparando la acción terrorista.
Según han informado fuentes presentes en la declaración, el testigo ha ratificado lo que ya explicó ante los Mossos d’Esquadra y ha reiterado que había visto y saludado en varias ocasiones a Driss Oukabir y a Younes Abouyaagoub en la vivienda que explotó la noche anterior de los atentados dejando tres muertos, entre ellos Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll dinamizador de este grupo terrorista.
La furgoneta que se utilizó en Barcelona estaba a nombre de Driss Oukabir, que se encuentra en prisión provisional desde el 22 de agosto del año pasado, tras declarar ante el juez Fernando Andreu; mientras que Younes Abouyaagou, el autor del atropello, fue abatido por los Mossos.
El testigo, que residía en una vivienda cercana a la que explotó, reconoció a través de fotografías a los presuntos yihadistas y ha añadido que incluso había visto dormir a Oukabir en un colchón en el jardín, han apuntado las fuentes consultadas.
El segundo testigo
El siguiente testigo protegido, un trabajador de una cafetería de Tona (Barcelona), ha destacado el «liderazgo» de este investigado, que se encuentra en prisión desde el 22 agosto del año pasado, en una conversación que mantuvo con Younes Abouyaagoub, autor del atropello masivo y abatido por los Mossos d’Esquadra, un día antes de los atentados.
El testigo ha apostillado que vio a Oukabir y Abouyaagoub mantener una conversación en árabe en ese establecimiento el 16 de agosto de 2017, un día antes de los atentados, y que el «liderazgo» de la charla lo tenía el primero de ellos.
Ha recordado que ambos sospechosos se situaron alejados del resto de los clientes, parecían alterados y estaban pendientes de una furgoneta en la que llegaron, la cual no ha podido identificar como la utilizada para el atropello masivo en las Ramblas.
Para las acusaciones, esta declaración es «importante» porque desmonta la versión de Oukabir, que negó haber estado en Alcanar, y le «vincula a los atentados terroristas», tal y como ha expresado a los medios de comunicación el abogado de las víctimas extranjeras, Ignacio Fuster-Fabra. También porque el presunto yihadista declaró ante el juez Andreu que él había alquilado la furgoneta a petición de su hermano Moussa —abatido en Cambrils— para hacer una «mudanza», modificando así lo declarado inicialmente ante los Mossos.
Para la defensa de las víctimas extranjeras esta declaración es «importante» porque desmonta la versión de Oukabir, que negó haber estado en Alcanar, y le «vincula a los atentados terroristas».
El segundo testigo, durante su declaración, ha señalado que cuando se acercaba a su mesa, los presuntos yihadistas dejaban de hablar y que Abouyaagoub evitaba mirarle. Aún así, el testigo pudo identificar a ambos cuando vio sus fotografías por televisión el día de los atentados, por lo que llamó a los servicios de emergencia para contar este encuentro.
Estos dos testigos protegidos han sido llamados a declarar después de que el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 levantase parcialmente el secreto de sumario de la causa el pasado martes al considerar que «dado el tiempo transcurrido no se va a perjudicar el resultado de las investigaciones».
Tres de los presuntos yihadistas, detenidos en España, y que presuntamente participaron en el atentado se encuentran en prisión preventiva. Se trata de Driss Oukabir; Mohamed Houli Chemlal —herido en la explosión de Alcanar—, que confesó ante el magistrado de la Audiencia Nacional que el grupo planeaba atentar contra monumentos como la Sagrada Familia; y Said Ben Iazza, por su relación con la compra y el traslado del material con el se fabricó el explosivo conocido como ‘madre de Satán’ y que se pretendía emplear para atentar en la ciudad condal.
Por otro lado, Mohamed Aalla, dueño del coche que atentó en Cambrils y el gerente del locutorio de Ripoll, Salh el Karib, quedaron en libertad tras pasar a disposición judicial. En Francia se encuentra otra persona en prisión preventiva desde el pasado mes de febrero, cuando fue detenido en Albi (Tarn) junto a otras dos que quedaron en libertad, por su presunta vinculación con estas acciones terroristas.