Nervios en Génova por la renovación de la Ejecutiva que planea Rajoy: “Nadie sabe si va a seguir o no»
«Nadie sabe si va a seguir o no». Este es el lamento de algunos nombres de la actual Ejecutiva del Partido Popular a menos de un mes del congreso. Aseguran que Rajoy está preparando una remodelación de su dirección aunque nadie sabe exactamente de qué se trata. «El presidente es hermético y lleva esto totalmente en silencio», señalan.
Lo cierto es que según fuentes del partido, los cambios podrían incluir la creación de nuevas vicesecretarías así como la salida de alguno de sus vicesecretarios actuales. El nombre que más suena como posible baja es el de Javier Arenas, «totalmente desaparecido» según las mismas fuentes.
«Existe cierto nerviosismo ante la incertidumbre de no saber qué va a pasar, hasta que llegue el congreso nadie tiene su puesto asegurado», insisten.
A estos cambios se suma la creación de una nueva coordinación que será ocupada por el actual vicesecretario de Organización, Fernando Martínez Maíllo, tal como adelantó OKDIARIO. El político zamorano se convertirá en el cargo intermedio entre la Secretaría General de la formación y los vicesecretarios, dejando así el hueco del responsable de Organización.
Cospedal conserva la Secretaría General
Como ha desvelado OKDIARIO, María Dolores de Cospedal continuará al frente de la Secretaría General del Partido Popular después del Congreso Nacional del partido. Pese a las dudas y polémicas sobre su continuidad en el cargo tras ser nombrada ministra de Defensa, Cospedal acordó con Mariano Rajoy que su nueva responsabilidad no sería incompatible con su labor de secretaria general.
Fuentes ‘populares’ consultadas por este diario aseguran que la figura de Cospedal se encuentra al alza a raíz de su gestión de la tragedia del Yak-42 y su trato hacia los familiares de las víctimas. Según dichas fuentes, su actuación en este asunto «le ha sumado muchos puntos», en un momento en que el presidente del Gobierno intenta dotar a su Gobierno de un perfil «más dialogante y empático».
Enmiendas en el Congreso
El PP afronta así su Congreso Nacional, que tendrá lugar en Madrid entre el 10 y el 12 de febrero, y donde la mayor polémica se ha creado en torno al sistema de elección de candidatos.
Según la posición de la dirección, defendida por el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martinez-Maillo, se instalarán dos urnas en las sedes de toda España: los afiliados inscritos votarán en una urna a los candidatos y en otra, a los compromisarios que les representarán en el Congreso. Pasarían a la segunda vuelta quienes lograsen más del 10 por ciento de los votos.
En la segunda vuelta serán los compromisarios los que finalmente elegirán al líder en el Congreso del partido. Además, el PP introduce el concepto de mayoría reforzada, por el que propone que haya candidato único si se cumplen tres condiciones: cuando un candidato obtenga más del 50% de los votos, si hay una diferencia de 15 puntos entre su candidatura y la siguiente y si el más aclamado consigue más de la mitad de los votos en 30 de las 60 circunscripciones en las que se divide el PP.
La principal contestación al sistema propuesto por Génova ha venido de la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes, que apuesta por la fórmula de «un militante, un voto» en la elección de los presidentes nacionales, regionales y provinciales.
La fórmula de Cifuentes mantiene el sistema de doble vuelta que también propone Martínez-Maillo, pero introduce como novedad que en la segunda vuelta todos los militantes puedan votar también al presidente. En el documento que defiende la dirección del partido esa segunda votación quedaría en manos de los compromisarios.