El mimo del PSOE a Bildu alerta ya al PNV que exige de los proetarras una condena expresa de ETA

El encargado de la puesta en escena de este estrategia es Josu Erkoreka

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Pedro Sánchez, en un momento de su intervención en la sesión de investidura. (Foto: Francisco Toledo / Okdiario)
Carlos Cuesta

Las nuevas alianzas del PSOE han alertado ya incluso al PNV. Los nacionalistas se han dado cuenta de que los favores a los proetarras por parte de los socialistas denotan una alianza estable que, a medio y largo plazo, hará peligrar el monopolio de los pactos en el País Vasco mantenido hasta el momento por el PNV.

El partido de Urkullu necesita del apoyo del PSOE-PSE para gobernar en la comunidad vasca y ha empezado una estrategia para dejar en evidencia a los de Bildu en pleno blanqueamiento de su imagen por parte de Pedro Sánchez. El primer paso, exigir que condenen los actos terroristas cometidos por ETA.

El PNV ha empezado a ver las orejas al lobo. La cercanía entre EH Bildu y el PSOE supone el auge de un peligroso enemigo electoral para los de Urkullu. Los nacionalistas, se enfrentan a elecciones el próximo año en el País Vasco y saben que un auge de EH Bildu puede poner en peligro su hegemonía actual. Y, por ello, los coqueteos obscenos entre Eh Bildu y Pedro Sánchez han levantado las alarmas en el PNV.

Los nacionalistas vascos saben que un auge de EH Bildu puede poner en peligro su hegemonía actual en el País Vasco

En estos momentos PNV gobierna en la comunidad vasca con el apoyo de los socialistas vascos. Pero EH Bildu, el gran competidor electoral de los nacionalistas, acaba de regalar la gobernabilidad navarra al PSOE y ha intentado favorecer la propia investidura de Pedro Sánchez con la abstención.

Símil con ERC

Es más, ERC ha tomado la misma actitud y no oculta su acercamiento al PSOE. Y ERC ha reconocido abiertamente, como publicó OKDIARIO, que actúan de forma coordinada ya con los proetarras. PNV se ha puesto en alerta y acaba de exigir a EH Bildu lo que no ha querido hacer aún el partido proetarra: una condena de las acciones terroristas de ETA cometidas en el pasado.

El encargado de la puesta en escena de este estrategia es Josu Erkoreka. Y el marco elegido, la Ponencia de Memoria y Convivencia del Parlamento vasco. Allí el PNV ha remarcado la negativa de los proetarras a condenar los asesinatos y ha señalado que ese tema se ha convertido ya en un problema y un “objeto de controversia” que empieza a generar “dificultades para alcanzar acuerdos” en el País Vasco.

El PNV, además, pretende dejar en evidencia a los proetarras por medio de planteamientos y pronunciamientos compartidos con el resto de grupos parlamentarios. Traducido: que presionará al PSOE-PSE para que tenga que tensar su idilio con EH Bildu criticando la negativa de los proetarras a condenar los asesinatos.

El PNV ha defendido ya en esa sede parlamentaria que Sortu «tiene que comprometerse en un futuro de convivencia y, si es sincero, honesto y leal con la sociedad vasca, tiene que hacer una lectura crítica de su pasado», con «una condena de la violencia, ahora y en el pasado, reconociendo que la violencia como instrumento de acción política siempre estuvo mal y nunca fue lícita». Es más, los nacionalistas señalan que «el marco de convivencia compartido es prácticamente imposible” sin ello.

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