Rajoy agradece en el Senado el apoyo del PSOE ante el golpe independentista
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha exhibido y agradecido públicamente en el pleno del Senado el apoyo del PSOE para hacer frente al desafío independentista en Cataluña, y ha pedido a los socialistas que no entren ahora en «temas menores» ni tampoco ha querido hablar «de los errores de unos y de otros».
«Agradezco mucho su apoyo y que lo reiteren, no estamos ahora para temas menores porque ahora el tema es que no podemos aceptar de ninguna manera, en una democracia asentada una de las más importantes del mundo y una de las más importantes de Europa, esos planteamientos totalitarios que pretenden pasar por encima de los derechos de todos los ciudadanos», ha respondido Rajoy al portavoz socialista en el Senado, Ander Gil.
Gil, que se estrenaba en una sesión de control preguntando al jefe del Ejecutivo, ha dedicado buena parte de su tiempo a dejar claro que Rajoy cuenta con el apoyo y la lealtad del PSOE para afrontar este reto, que ha calificado como «el mayor desafío de la historia reciente» a la soberanía nacional, al Estatut y a la convivencia democrático, por parte del «secesionismo extremista catalán».
El socialista ha aprovechado para poner en valor la actitud de los alcaldes del PSC —aunque haya al menos 28 que ya le han dado el ‘sí’ a Puigdemont para su referéndum ilegal, como informaba este lunes OKDIARIO—, que están demostrando el «alto sentido de Estado de los socialistas» defendiendo «en condiciones muy difíciles la democracia, el autogobierno y las instituciones en Cataluña», al negarse a poner locales para la celebración del referéndum independentista.
«Ninguneo de los anhelos de la sociedad»
Sin embargo, también ha afeado a Rajoy su «ninguneo de los anhelos de la sociedad catalana» y le ha remarcado que su partido cometió un error al recoger firmas contra el Estatuto de Cataluña cuando éste se estaba negociando, tal como ha dicho el ex ministro de Exteriores José Manuel García-Margallo.
Así, le ha emplazado a empezar a hablar del futuro y a buscar una solución «para Cataluña y para España», que sea «una solución justa que garantice la recuperación económica de los que más han sufrido la crisis», que asegure la igualdad de derechos de todos los españoles y que se encuentre una fórmula que «de una vez por todas» asuma que la diversidad de los españoles «es una fortaleza y no un riesgo», que reconozca la diversidad y que devuelva a los españoles «la ilusión por un proyecto común».
Ése es el propósito, ha dicho, de la comisión parlamentaria propuesta por el PSOE en el Congreso para abrir «un diálogo sin exclusiones» incluso con los que «hoy albergan algún tipo de duda de dónde posicionarse en el futuro». Para el PSOE, no es demasiado tarde para buscar soluciones y lo que hay que hacer es dejar de perder el tiempo, hacer política y no solo ampararse en la ley.
Rajoy: no es hora de «debates estériles»
Sin embargo, Rajoy ha dejado claro que no pensaba hablar de los posibles errores «ni de unos ni de otros», porque no es momento de «discrepancias menores ni de debates estériles». Así, ha dicho estar de acuerdo con esos tres principios enunciados por el socialista y ha dicho no tener «inconveniente en hablar de ello cuando les parezca bien», pero no se ha pronunciado en concreto de la propuesta del PSOE de crear una comisión parlamentaria que evalúe y modernice el modelo territorial.
Rajoy se ha limitado a decir que coincide con los socialistas en la necesidad de diálogo y de hacer política, cosa que él lleva haciendo «muchos años», pero que no cabe dialogar cuando lo que se le pide es un referéndum «que liquidaría la soberanía nacional».
Ello le ha dado pie a volver a hacer un relato de lo sucedido la semana pasada en el Parlamento catalán, cuando en 12 horas un día y en otras cuatro al día siguiente «se liquida el Estatut y la Constitución» y se establece una pretendida nueva legalidad, «sin legitimidad alguna para hacerlo», «hurtando» a los diputados sus derechos y tratando a los letrados de la Cámara «como nunca se debe tratar a un letrado o a una persona».
«Qué dirían ustedes si yo me plantara aquí y tratara de hacer la mitad de la mitad de la mitad de la mitad de lo que se hizo en Cataluña los días 6 y 7 de septiembre», se ha preguntado.
Así, ha remarcado que el problema de fondo no es sólo de soberanía nacional y de liquidación de la Constitución, sino de «ataque a los derechos y libertades».
El socialista ya había subrayado que Rajoy cuenta «con toda la fuerza de la ley y del Estado de Derecho» y que éste «cuenta con todo el apoyo y la lealtad del PSOE y de su secretario general», como partido de Estado que ha gobernado «muchos años» y sigue haciéndolo en comunidades y ayuntamientos. «Los socialistas nunca vamos a faltar a nuestra responsabilidad para con España y no lo vamos a hacer en esta ocasión», ha remachado.
En la misma línea, antes de comenzar la parte de su intervención crítica con el Gobierno, ha insistido que del «salto al vacío que ha dado el soberanismo extremista» y de las consecuencias de ese «viaje a ninguna parte» sólo son responsables los independentistas.
A ellos les ha reprochado «insensatez, incompetencia y falta de respeto a la legalidad», por «prometer la luna en forma de una independencia que nunca será» y por «envolverse en la bandera para tapar su incapacidad ante la crisis» o sus casos de corrupción.