Congreso de los Diputados

El inhabilitado Alberto Rodríguez se burla del Supremo y habla en el Congreso con permiso de Batet

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El condenado e inhabilitado Alberto Rodríguez este jueves en el Congreso.
Segundo Sanz

Hace ya una semana que se conoció la sentencia del Tribunal Supremo condenando en firme e inhabilitando al aforado Alberto Rodríguez, diputado de Podemos en el Congreso, por patear a un policía durante una manifestación en 2014 contra la ley Wert en Canarias. Sin embargo, este jueves, siete días después, todavía permanece en su escaño e incluso ha subido a la tribuna a defender la posición de un grupo en un decreto de ley del Gobierno sobre el ámbito laboral. Todo ello, con la complicidad de la presidenta de la Cámara baja, la socialista Meritxell Batet.  El Alto Tribunal decretó condena de inhabilitación de Rodríguez para el ejercicio del sufragio pasivo, lo que supone la pérdida del escaño por «inelegibilidad sobrevenida».

En esta última semana se han celebrado dos reuniones (lunes y miércoles) de la Mesa del Congreso, que preside Batet, y en ninguna de ellas se ha abordado la pérdida del escaño por parte de Rodríguez conforme a la sentencia del Tribunal Supremo, que tuvo amplia difusión en los medios de comunicación. La excusa en ambos casos fue que todavía no había llegado formalmente la comunicación del Supremo con la sentencia condenatoria de Rodríguez, trámite administrativo que se ha producido ya este jueves. También el escrito ha sido remitido a Junta Electoral Central (JEC). Sin embargo, todavía no se ha convocado ninguna reunión ni de la Mesa ni de la Junta Electoral para resolver si Rodríguez pierde el escaño o sería suficiente con una suspensión temporal de sus funciones y derechos.

No se ha despedido

Con el escrito ya en las Cortes, el diputado inhabilitado ha subida a la tribuna de la Cámara y ha lanzado consignas populistas del tipo «seguiremos apretando», sin mostrar el más mínimo ápice de que ésta fuera su última intervención en la Cámara baja. Al contrario, Rodríguez no se ha despedido y ha recibido una fuerte ovación de sus compañeros de bancada, e incluso de diputados socialistas pese a estar condenado.

El Alto Tribunal condenó al diputado de Unidas Podemos -electo por Tenerife- a la pena de prisión de un mes y quince días como autor de un delito de atentado a agente de la autoridad en una manifestación en 2014, con la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas. La condena conlleva la accesoria de inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena.

Tanto Vox el pasado viernes, a través de un escrito firmado por la diputada Macarena Olona, como el diputado del Grupo Mixto Pablo Cambronero, ex portavoz de Interior de Ciudadanos en la Cámara, habían emplazado a la Mesa a retirar la condición de diputado a Alberto Rodríguez en base a dicha inhabilitación decretada por el Supremo. Sin embargo, la Mesa, controlada por PSOE y Podemos, evitó abordar la cuestión este miércoles

El propio Rodríguez, tal y como ha publicado OKDIARIO, ha remitido una carta a la Mesa del Congreso en la que pide que no le sea retirada la condición plena de diputado puesto que ya ha «cumplido» la condena (pena de prisión sustituida por una multa de 540 euros) para esquivar la segunda parte de la misma: la inhabilitación.

A dicha sustitución de pena de cárcel por multa se agarra la defensa de Alberto Rodríguez, conocido en Podemos como ‘El rastas’, esgrimiendo que la sentencia del Tribunal Supremo no permite aplicar la inhabilitación absoluta que conllevaría la pérdida inmediata del escaño como ocurrió con Joan Josep Nuet o Francesc Homs, los últimos diputados del Congreso desposeídos de su acta por condena firme.

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