La golpista Forcadell sale de la cárcel provocando: «Persistimos»
Comienzan los permisos penitenciarios para la golpista Carme Forcadell. La ex presidenta del Parlament ha salido de la prisión de Mas d’Enric de El Catllar, en Tarragona, para realizar labores de voluntariado y cuidar a su madre.
Los permisos fueron otorgados el pasado 12 de febrero por la Junta de Tratamiento de Mas d’Enric. El organismo permitió a Forcadell salir de la cárcel tres días a la semana, nueve horas diarias, para realizar estas actividades mediante la aplicación del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario.
La ex presidenta del Parlament ha logrado beneficiarse del 100.2 tras entregar la documentación pertinente al centro penitenciario que acredita que en las salidas que le concedan llevará a cabo labores de voluntariado y se hará cargo de su madre anciana.
La separatista ha celebrado en un tuit su salida de prisión. Además vuelve a provocar asegurando que «persistirán»:
Persistim. pic.twitter.com/b8CPV5BNAg
— Carme Forcadell (@ForcadellCarme) February 17, 2020
El permiso
La Junta de Tratamiento Penitenciario, que depende de la Generalitat presidida por el inhabilitado Quim Torra, confirmó la semana pasada que la separatista iba a salir de la cárcel tres días por semana, durante nueve horas, para prestar labores de voluntariado y cuidar de su madre de avanzada edad. La decisión responde a la aplicación del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario que permite flexibilizar el cumplimiento de la pena a los presos clasificados en segundo grado.
La decisión de la Junta de Tratamiento de la cárcel de Mas M’Enric, en Tarragona, donde Forcadell cumple la pena por sedición impuesta por el Supremo, puede ser recurrida por la Fiscalía. Sin embargo, esta posibilidad no impide que Forcadell se beneficie de su excarcelación de manera inmediata, durante tres días a la semana en los que sólo tendrá que volver a la cárcel a dormir, como ya sucedió en el caso de los ‘Jordis’, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.
Todos los separatistas catalanes condenados en firme por organizar el referéndum ilegal del 1-O, fueron clasificados en segundo grado, una vez el Supremo les notificó la sentencia, requisito imprescindible para optar al régimen de semilibertad del artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario.