El Gobierno vasco incluye «en pruebas» el terrorismo de ETA en los programas escolares de Historia

El Gobierno Vasco ha anunciado este jueves que el próximo curso escolar 2018/2019 llevará a cabo en ocho centros educativos, una experiencia piloto con la que incluirá en la asignatura de Historia que cursan los alumnos de 4º de la ESO y 2º de Bachillerato el terrorismo de ETA, a través de una unidad didáctica que abarcará el periodo 1960-2018.

La consejera de Educación, Cristina Uriarte, el secretario general de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación Jonan Fernandez, la directora de Gogora Aintzane Ezenarro y la viceconsejera de Educación Maite Alonso han presentado este jueves en una rueda de prensa celebrada en Vitoria la iniciativa educativa ‘Herenegun’ (anteayer) sobre la memoria reciente de Euskadi.

Uriarte ha explicado que el principal objetivo de la iniciativa busca «contribuir a que el alumnado llegue a comprender un periodo especialmente convulso y violento de la historia reciente de Euskadi». «Asimismo persigue ofrecer recursos para que el alumnado pueda preguntarse y buscar respuestas sobre cómo y por qué ocurrieron los hechos del pasado, y cómo influyen en el presente», ha señalado.

Según ha defendido, «la reflexión tanto sobre la Memoria Histórica como sobre la Memoria Reciente tienen una indudable dimensión ética; pero, desde el punto de vista educativo, también tiene una indudable dimensión histórica que debe tener su propio reflejo», ya que «no se trata de dimensiones aisladas, sino que están interconectadas y se complementan».

La consejera ha informado de que el próximo curso se va a poner en marcha una experiencia piloto en ocho centros escolares donde «insertarán» el periodo 1960-2018 en la asignatura de Historia de 4º de ESO y de 2º de Bachillerato.

Tras este periodo de prueba, se evaluará la experiencia para poder extender su implantación al resto de centros educativos con el objetivo de que llegue al conjunto de centros educativos antes de que finalice la legislatura. Según ha explicado la titular de Educación, los contenidos de esta unidad didáctica y materiales que se van a trasladar a los centros está «muy avanzado».

En este sentido, el secretario general de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación Jonan Fernandez, ha informado de que la unidad didáctica parte de la serie documental ‘Las Huellas perdidas’, producida por Filmak Media y dirigida por Fermin Aio, enmarcada en el acuerdo de colaboración entre EiTB y Gobierno Vasco para el desarrollo del Plan de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco. Se compone de cinco documentales de una hora ordenados por décadas, desde 1960 hasta 2011.

Según ha explicado Fernández, se ha elaborado una versión reducida de cinco capítulos, cada uno de ellos con una duración de 22-23 minutos, que ha sido supervisada por el historiador Juan Pablo Fusi, la ex consejera de Cultura y profesora Mari Carmen Garmendia y el periodista Mariano Ferrer.

Fernández ha explicado que estos cinco capítulos van a constituir la «herramienta dinamizadora central» de esta unidad didáctica que abarcará el periodo 1960-2018, «el tiempo de existencia de ETA», abordando en este periodo «la historia de ETA y la evolución socio-política, institucional, económica vasca».

Metodología

La experiencia piloto contará con cuatro cuadernos. El primero ofrecerá al profesorado un marco introductorio desde el punto de vista historiográfico. Se trata de un resumen de 10 páginas de la historia de Euskadi desde 1960 con el título ‘ETA en el contexto sociopolítico vasco: Síntesis histórica 1960-2011’.

El secretario general de Convivencia ha señalado que es un documento «cuya responsabilidad corresponde al Gobierno Vasco», pero que cuenta con el «visto bueno» de Fusi, Garmendia y Ferrer, de forma que ofrecerá al profesorado un marco introductorio «desde el punto de vista historiográfico».

«Si cada una de estas tres personas hubiera tenido que escribir este documento en solitario, seguramente el resultado habría tenido matices diferentes. El valor añadido que tiene este texto es que ha podido recoger una diversidad de visiones con autoridad y perspectiva histórica», ha destacado.

El segundo cuaderno ofrece el plan de trabajo que se seguirá dentro de la asignatura de Historia de 4º de DBH-ESO. Plantea seis sesiones de 55 minutos, cinco de ellas orientadas al trabajo con cada documental, y la sexta dedicada al trabajo de conclusiones y evaluación.

El plan de trabajo dentro de la asignatura de Historia de 2º de Bachillerato se incluye en el tercer cuaderno y será similar al anterior pero introduce matices diferentes desde el punto de vista pedagógico, adaptados a la edad y al proceso de aprendizaje en cada caso.

El último cuaderno, que se encuentra en proceso de elaboración, va a contener documentación complementaria con textos que pueden ser de utilidad para el profesorado, con información sobre cuestiones metodológicas o debates que se están dando como la diferencia entre memoria e historia.

Fernández ha reconocido que el análisis del pasado es «difícil» porque se trata del «diagnóstico de la culpa, de la responsabilidad, el sufrimiento padecido, las diferentes lecturas sobre sus causas y génesis», y «lo es más, cuando el dolor que se recuerda es reciente en el tiempo».

«Podríamos decir que el pasado nos duele y nos divide, por eso, abordar este tema desde una perspectiva histórica, además de ética, es algo tan complejo como necesario. Tenemos que mirar al pasado sin miedo y dispuestos a aprender de lo sucedido para que no vuelva a repetirse», ha subrayado.

Por ello, ha defendido que «la mirada al pasado debe partir de un doble compromiso democrático: pluralismo y derechos humanos». Tras señalar que «lo sucedido en los últimos 58 años va a tener lecturas e interpretaciones plurales», ha indicado que este pluralismo tiene como «único límite» que «ninguna vulneración de derechos humanos, ninguna forma de terrorismo o violencia puede encontrar legitimación o justificación en esa lectura del pasado».