El Gobierno rechaza que la seguridad del móvil de Sánchez pase de Presidencia al CNI
PSOE y Podemos, los dos partidos que sostienen el Gobierno de coalición, rechazaron este miércoles en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley del PP que emplazaba al Ejecutivo a que «asigne la competencia de la seguridad de los móviles del presidente y de los altos cargos al Centro Criptológico Nacional», dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
La seguridad de los móviles de los miembros del Gobierno no es competencia directa del CNI, sino del Departamento de Seguridad de Moncloa, que cuando en 2019 se produjo el hackeo al móvil de Sánchez, estaba bajo las órdenes de Félix Bolaños, entonces secretario general de Presidencia del Gobierno y ahora ministro de la Presidencia.
El PP sometió a debate y votación este miércoles en la Comisión de Defensa de la Cámara Baja una proposición no de ley de apoyo a los miembros de los servicios secretos españoles que emplazaba a Moncloa a este cambio de competencia. Sin embargo, no salió adelante por 19 votos en contra frente a 16 a favor. En concreto, el PSOE se opuso trasladando «nuestro apoyo al Centro Nacional de Inteligencia pero no a esta proposición de ley» que sólo «pretende desgastar al Gobierno utilizando el CNI», manifestó Ana Botella, ex secretaria de Estado de Seguridad. La diputada socialista acusó así a los populares de «utilización partidista de las instituciones del Estado».
El pasado 4 de mayo, la propia ministra de Defensa deslizó que la seguridad de los móviles que utiliza el Gobierno depende del Ministerio de Presidencia. Preguntada por este asunto en plena crisis por el caso Pegasus, Robles dijo que bastaba «un minuto de tiempo» para consultarlo. «La ventaja de una democracia es que todo está en la ley, en las normas. Y, por tanto, no hay más que echar un minuto de tiempo», contestó.
Según el organigrama, la seguridad de las comunicaciones del Gobierno corresponde a la Unidad de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, que depende de la secretaría general de Presidencia del Gobierno.
Pese a que el espionaje internacional con Pegasus ya era un secreto a voces en la prensa desde 2019, con los independentistas catalanes presentándose también como víctimas, la unidad de seguridad de Moncloa que controlaba por Bolaños no procedió a una revisión del teléfono de Pedro Sánchez. No fue hasta el pasado 2 de mayo, en una improvisada rueda de prensa en el Palacio de Puerta Hierro, cuando el propio Bolaños salió a decir que ese fin de semana se había confirmado que el móvil del presidente había sido infectado.
Destitución
Finalmente, Sánchez culpó al CNI de una «brecha de seguridad» y acabó entregando a los separatistas la destitución de la directora general del Centro, Paz Esteban, con tal de que sus socios independentistas no le compliquen la legislatura.
En la exposición de motivos de su iniciativa, el PP cuestiona que las recientes actuaciones del Gobierno han deslucido el 20 aniversario del CNI (antes Cesid), «provocando justo un efecto contrario, pues han colocado imprudentemente al CNI en el centro de la polémica, cuestionando ante los ojos de la opinión pública su eficacia y su buen hacer». «Un agravio al que ha contribuido el propio presidente del Gobierno, a pesar de ser el principal beneficiario de la excelente hoja de servicios prestada por el CNI», enfatizan los populares.
El diputado del PP Antonio González Terol, que defendió la proposición, criticó que el Gobierno haya destituido a Paz Esteban como directora del CNI sin tener en cuenta el «desprestigio» internacional que esto puede causar en vísperas de la celebración de la Cumbre de la OTAN en Madrid.