ERC pone precio para investir a Sánchez: indulto a los golpistas, negociar de igual a igual y el referéndum

Esquerra Republicana pone sus cartas sobre la mesa. Si el PSOE quiere negociar con ellos la investidura del candidato socialista, Pedro Sánchez, tendrá que asumir, de entrada, «cuatro patas de la mesa de negociación», que para el partido separatista son las siguientes: reconocer el conflicto, la amnistía y un referéndum, dialogar de igual a igual y un calendario.

A pocas horas para que dé inicio la consulta de ERC a sus bases sobre apoyar o no la investidura de Sánchez, el vicepresidente de la Generalitat y coordinador nacional del partido, Pere Aragonès, publica, en una tribuna en La Vanguardia, las condiciones para que su voto sea favorable.

El hombre fuerte de Esquerra, que según ha podido saber este periódico este lunes votará a favor de rechazar la investidura del presidente en funciones si no se compromete con las peticiones de su formación, pide «un diálogo de igual a igual, de Govern a Gobierno».

Aragonès considera «imprescindible que se reconozca que estamos en un conflicto político entre Cataluña y el estado español y que hagamos política». Pide que ese diálogo sea «sin condiciones» y ya avanza que la parte catalana trasladará la necesidad de ejercer «el derecho a la autodeterminación» en forma de «referéndum».

El número dos del gobierno catalán considera «un sinsentido mantener encerrados en prisión y en el exilio a los dirigentes de los partidos soberanistas por haber puesto las urnas». Por eso, ERC exigirá al Partido Socialista una amnistía para los condenados.

ERC cree que su propuesta es «razonable», a la vez que admite que está «muy lejos de los objetivos políticos que defendemos desde hace 88 años». Con un calendario claro -que pasaría por un gesto antes de la investidura debido a la falta de confianza- y garantías de cumplimiento, dice Aragonès, su partido tendría «suficiente para dar el primer paso hacia la solución democrática».

Pere Aragonès finaliza su misiva alertando de que «esta mesa es una condición imprescindible para replantear nuestra posición en el voto de investidura» y advierte que, sin ella, los 13 representantes de su partido «votarán no». Eso implica que, junto al ‘no’ del resto de separatistas, Sánchez no lograría ser investido.