Millo: «Hablan de diálogo pero Torra es como un niño, ni me saluda ni coge el teléfono»
El delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, ha acusado hoy al president Quim Torra de «ser un maleducado», de no cogerle el teléfono y comportarse «como un niño pequeño de patio de colegio» después de que, ha dicho, le diera la espalda y le negara el saludo en un acto en que coincidieron este martes.
Millo ha protagonizado un almuerzo-coloquio en el Círculo Ecuestre, en Barcelona, con el título ‘Cataluña: estabilidad, cohesión y crecimiento’, en el que se ha referido a su relación con el nuevo presidente catalán, al ser preguntado al respecto.
Tras hacer un «llamamiento a la responsabilidad» y a la «generosidad» para «darnos todos una oportunidad», Millo ha abogado por el diálogo, pero ha lamentado que tanto el presidente del Parlament, Roger Torrent (ERC), como el presidente de la Generalitat, Quim Torra, se hayan negado a conversar con él. «Y hablan de diálogo…», ha ironizado.
Millo ha relatado que, desde después de que Torra tomara posesión, él ha intentado conversar telefónicamente con el nuevo president «desde el primer día por la tarde para felicitarlo institucionalmente», pero todavía no ha logrado hacerlo.
Pero ha ido más allá al explicar que, cuando ambos dirigentes coincidieron ayer en la Gala Catalán del Año 2017, el president le ignoró: «Fui a saludarle y me dio la espalda, no me dio ni la mano, me negó el saludo. En mi casa, a eso le llaman ser un maleducado», ha aseverado Millo.
También ha criticado que Torra iniciara su intervención en dicho acto saludando al «muy honorable presidente del Parlament» y a la «excelentísima señora alcaldesa de Barcelona, Ada Colau», pero no le nombrara a él directamente y se limitara a añadir «resto de autoridades», pese a que Millo ha recordado que el delegado del Gobierno es «la tercera autoridad del país, según la Constitución».
Es por todo ello que ha pedido que la «nueva etapa se base en el respeto»: «Yo no tengo problema en darle la mano a una persona que piensa diferente que yo. Respeto las ideas de todo el mundo. No actúo como un niño pequeño de patio de colegio dándole la espalda a otro que no me gusta lo que dice, si tiene una responsabilidad y una representatividad institucional», ha advertido.
Y ha considerado que «todos deberíamos actuar de la misma manera para sentar las bases de un diálogo sincero y leal», además de pedir a Torra que «se comprometa públicamente con que Cataluña somos todos», porque «aún no se lo he escuchado decir y habla en nombre de un pueblo que son solo dos millones», en alusión a los votantes independentistas.