Una empresa de Lugo exhumará a Franco tras las amenazas sufridas por la funeraria Nuestra Señora de la Jarosa

El pasado mes de febrero el Ejecutivo de Pedro Sánchez tenía previsto todo el dispositivo para poner en marcha la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos. Eso incluía a los responsables de la funeraria Nuestra Señora de la Jarosa, los encargados de realizar la operación de traslado de Franco para su inhumación en el cementerio de Mingorrubio en El Pardo (Madrid). Finalmente esta labor la desempeñará una funeraria de Lugo, Iber Funerarias, después de que los dueños de Nuestra Señora de la Jarosa renunciaran por la presión y las amenazas recibidas.

Grupos de ultraderecha presionan a los actores que tomarán partido este jueves en un momento histórico: la exhumación de Franco del Valle de los Caídos. Ni las funerarias ni los marmolistas, que se encargarán de levantar la pesada lápida bajo la cual descansan los restos del dictador, se han librado de los insultos y las amenazas de estos elementos, que consideran «una profanación» lo que ocurrirá sí o sí hoy jueves en el Valle de los Caídos.

Los responsables de la funeraria Nuestra Señora de la Jarosa –que administra el Tanatorio de San Lorenzo de El Escorial– sufrieron tal presión que decidieron declinar el contrato que les ofreció el Gobierno para trasladar los restos de Franco a su nuevo lugar de descanso eterno. El encargo, con el envío de toda la documentación pertinente y las indicaciones realizadas por Patrimonio Nacional se realizó en el mes de febrero.

A medida que el proceso de exhumación se enquistaba, con reclamaciones y recursos por parte de los nietos del dictador hasta llegar al Supremo, la presión se hizo insoportable para los encargados de Nuestra Señora de la Jarosa.

Por tanto, este jueves la exhumación la llevarán a cabo empleados de Iber Funerarias, una empresa gallega que cuenta con funerarias en cuatro pueblos de la provincia de Lugo.

Marmolistas

Este mismo miércoles se conocía que las presiones a las que han sido sometidos los dueños de las funerarias también se han trasladado a los marmolistas encargados de levantar la lápida de Franco.

La empresa de los hermanos Juan Carlos y Lorenzo Verdugo Jiménez ha denunciado públicamente la campaña de «insultos, falsas acusaciones y amenazas» que están sufriendo.

La empresa de los hermanos Verdugo ha emitido un comunicado en el que muestran su extrañeza por el «protagonismo» que los medios de comunicación han dado a «unos modestos trabajadores» que se limitan a realizar los trabajos que se les encomiendan «totalmente ajenos a intereses partidistas y a decisiones políticas o judiciales».

Los dueños de la empresa «Mármoles y granitos Hermanos Verdugo Jiménez», radicada en Villamayor de Santiago (Cuenca), piden que se les permita hacer su trabajo «tranquilos» y que se les «deje de utilizar por cualquier interés político».