El Ejército suspende las pruebas del nuevo «tanque» que no le gusta a Pablo Iglesias

El Ejército de Tierra ha comunicado a las empresas que optan a fabricar el nuevo vehículo blindado de transporte que se suspenden las pruebas de tiro que estaban previstas para esta semana en Aragón. El proyecto ‘8×8’, uno de los más prioritarios para las Fuerzas Armadas, fue criticado por el vicepresidente Segundo, Pablo Iglesias, quien hace unas semanas aseguró que la prioridad del Gobierno no era «gastar en tanques».

Las esperadas pruebas de los vehículos 8×8 ‘Dragón’, el que será el vehículo de transporte blindado de las próximas décadas para los militares españoles, han sido suspendidas de forma indefinida.

Los ‘demostradores’, las primeras unidades ya construidas para poder comprobar su eficacia antes de la firma del contrato, tenían previsto viajar este pasado viernes desde Andalucía hasta las instalaciones del campo de maniobras de San Gregorio (Zaragoza). Allí serían operados por personal de la Legión trasladada desde Almería.

Sin embargo, tal y como ha confirmado OKDIARIO de fuentes de la industria relacionadas con el proyecto, el Ejército ha decido dejarlas en suspenso por cuestiones «medioambientales»: se teme que las prácticas de tiro puedan provocar incendios forestales en el polígono de tiro donde se iban a realizar los test.

Estos vehículos equiparán unas torres de armamento que se controlarán de forma remota desde el interior del vehículo. Los fabricantes que optan a suministrar estos sistemas habían preparado las torres para que pudiesen disparar misiles tipo ‘Spike’, que son lanzados y guiados hasta su objetivo por un operador militar. La decisión de suspenderla ha provocado gran revuelo en el sector, especialmente entre las empresas que optan al contrato, ya que ya tenían todo preparado para acudir a Aragón la próxima semana. Se enteraron a última hora.

Según ha podido confirmar OKDIARIO de fuentes militares, el Ejército de Tierra está barajando varias alternativas a la localización de Aragón. Una de ellas es Almería, en el Campo de Tiro y Maniobras (CTYM) “Álvarez de Sotomayor” donde se entrena habitualmente la Legión. Otra, el campo de tiro de Renedo (Valladolid).

Sin embargo, ambas localizaciones presentan varios problemas técnicos para la prueba: allí no se pueden «disparar misiles ni munición especial», y sólo quedaría el uso de munición inerte (que no explota). Esas pruebas, en definitiva, sólo «valdrían para nada más que la foto» tal y como explican desde el sector.

«Tanques» prescindibles para Iglesias

Las Fuerzas Armadas españolas llevan detrás del proyecto 8×8 más de una década a pesar de que año tras año lo han señalado como una de las adquisiciones más urgentes y estratégicas para su operatividad.

Estos vehículos blindados serán el transporte del futuro para las tropas en sus misiones internacionales, aportándoles un plus de seguridad que no disponen en este momento. Estos vehículos son los herederos de los ya ‘jubilados’ BMR, cuyo déficit de blindaje provocó bajas entre los militares españoles en varios ataques en Afganistán y Líbano.

Sin embargo, en el Gobierno de Pedro Sánchez existen voces discordantes con la adquisición para el Ejército, principalmente la del vicepresidente segundo Pablo Iglesias. En una entrevista con la radio pública catalana el pasado mes de mayo, Iglesias advirtió de que «nadie piense que la prioridad es comprar tanques», en referencia al contrato recién firmado por Defensa para la adquisición de estos vehículos, que llega con una década de retrasos y cuya factura final asciende a más de 2.100 millones de euros.

Robles, preguntada posteriormente por las palabras de Iglesias, advirtió de que «algunos hablan desde la mejor intención, pero quizá sin conocimiento».

Iglesias contra el gasto militar

De fondo de esta polémica se encuentra la negativa de Podemos, socio de Gobierno de Sánchez, a aumentar el gasto militar en los próximos Presupuestos Generales del Estado que ya negocian ambos partidos.

España tiene desde hace años un serio problema con sus cuentas y las exigencias de la OTAN, que le reclaman que gaste al menos un 2% de su Producto Interior Bruto en materia de defensa. Sin embargo, España apenas alcanza el 0,9% y no hay visos de mejora.

De todos los aliados, el que más molesto se ha mostrado con esta falta de gasto -a la que se comprometió España en 2014- es Estados Unidos. El presidente norteamericano, Donald Trump, incluso calificó a España y otros países que no cumplen con esta regla de gasto de «morosos». En las últimas cumbres internacionales, Sánchez incluso fue apartado de las grandes reuniones periféricas que mantienen los socios de la OTAN en el marco de las cumbres.