Los dirigentes críticos del PSOE temen que Sánchez sea «el nuevo portavoz de Podemos»

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Pablo Iglesias y Pedro Sánchez, en el Congreso. (EFE)

Una gran mayoría de dirigentes del PSOE se puso este lunes a disposición del reelegido secretario general, Pedro Sánchez, para facilitar la «integración» y la «unidad» que tanto pregonó durante su campaña.

Sin embargo, Sánchez pasó de contestar enseguida los mensajes de algunos barones que le felicitaron para atender la llamada del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias. El temor entre algunos socialistas pasa porque Sánchez se convierta en el «nuevo portavoz de Podemos». 

La llamada Sánchez-Iglesias un día después del triunfo del socialista es clave para determinar las futuras alianzas del partido. Una líneas totalmente antagónicas de lo que era hasta ahora el pacto de ‘no agresión’ entre PSOE y PP. El presidente del Gobierno retrasó decisiones sobre los Presupuestos hasta que supiera con qué secretario general iba a tratar.

Mariano Rajoy salió este lunes a dar una rueda de prensa con preguntas a los periodistas y explicó que no había llamado al nuevo líder socialista para «no molestarle». Sin embargo, hubo quien lo llamó para hacerle una oferta que no podría rechazar. Iglesias ofreció a Sánchez retirar su moción de censura contra Rajoy a cambio de apoyar la suya.

El reelegido líder socialista aseguró en campaña que si ganaba no descartaba presentar una moción de censura. Iglesias quiere llevar a Sánchez a su terreno y propuso a Sánchez buscar un «programa alternativo conjunto» con el PSOE para sacar al PP del Gobierno mediante una moción de censura de los socialistas en la que no pondría objeciones a que el candidato a la Presidencia fuera su nuevo secretario general, Pedro Sánchez.

Música celestial para los oídos de Sánchez que todavía no se ha pronunciado sobre el asunto. El equipo del socialista confirmó cuando aún era candidato que no descartaba presentarse a las primarias abiertas para ser candidato a La Moncloa si éste perdía las primarias a la Secretaría General. Un ego que podía ver colmado presentándose como candidato a esa moción.

«Siempre hemos sido muy claros; la fuerza política con mayor número de escaños tiene derecho a proponer candidato», dijo Iglesias para atraer a los socialistas a su red. El líder de Podemos no quiso desvelar la contestación del socialista para darle más entretenimiento al asunto y seguir siendo relevantes en el ámbito mediático. Iglesias continuó señalando que no quiere «establecer ningún tipo de presión sobre nadie» y mostró su comprensión hacia el «período de reflexión» que pueda necesitar Pedro Sánchez, habida cuenta de que acaba de ser elegido nuevo líder socialista.

«Por nuestra parte, generosidad y mano tendida», insistió Iglesias.   También dijo que en su conversación con Sánchez ambos han compartido «la necesidad de sacar al PP del Gobierno» y dejó claro que desde Podemos quieren ser «muy respetuosos» con la diferencia de «estrategias» para conseguirlo; sin embargo, defendió que en la actual situación no se puede «aflojar la presión sobre el PP».

Algunos dirigentes socialistas observan con temor estos hechos y añaden que «ahora estamos por coser» y esperamos que Sánchez «no se convierta en el portavoz de Podemos». Muchos consideran que de no convocar elecciones anticipadas Mariano Rajoy, el PSOE podría convertirse en el PASOK griego en manos de Podemos. Otros por el contrario, apuestan por una línea dura marcando distancia con el líder de la formación morada para conquistar «los votos que perdimos dándole la abstención a Rajoy».

Los socialistas no tienen todavía un proyecto claro, que definirán en el 39 Congreso Federal los días 17 y 18 de junio. Mientras, los nervios aumentan observando los movimientos de Sánchez y si de verdad cumple con su palabra y respeta la integración llamando a los barones y enterrando por ambas partes el ‘hacha de guerra’.

 

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