Pablo Iglesias aprovecha la tribuna del Congreso para dar un mitin del 15M

Pablo Iglesias aprovecha la tribuna del Congreso para dar un mitin del 15M
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante el debate de investidura. ( Efe)

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha comenzado su discurso del ‘no’ a todos arremetiendo contra el presidente en funciones, Mariano Rajoy, a pesar de que su intervención se enmarcaba en la réplica al candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, para continuar con los líderes del PSOE y Ciudadanos, para quienes también ha tenido duras palabras.

«Algunos de ustedes son hijos políticos del totalitarismo en este país», ha expresado el líder de Podemos a los populares, para añadir que «son los responsables de que la corrupción y la injusticia se hayan convertido en una de las mayores vergüenzas de España».

Iglesias le ha dicho al Partido Popular que su formación fue fundada «por siete ministros de la dictadura».

«Han sido arrogantes con los débiles y serviles con los poderosos», ha apuntado en referencia al PP.

Iglesias se ha estrenado este miércoles en la tribuna del Congreso, homenajeando a las víctimas de la dictadura franquista, y ha mencionado en concreto a Salvador Puig Antich y a los trabajadores de Vitoria «asesinados hace 40 años por defender derechos sociales de todos».

El podemita ha tenido palabras de recuerdo para aquéllos que, según él, lucharon por la justicia social y se enfrentaron a la dictadura. «Muchísimas gracias por ser ejemplo para nosotros y para las generaciones futuras», ha dicho

Iglesias también ha destacado el movimiento del 15M, «estamos hoy aquí trabajando para cambiar las cosas gracias al 15M». Y ha continuado: «Llegamos a este Parlamento empujados por la ilusión, convirtiendo en proyecto político un sencillo mensaje de la gente en las plazas: Sí se puede», ha expresado Iglesias.

«Nuestra presencia aquí hoy demuestra que aquel movimiento lo cambió todo», ha añadido.

El podemita ha tenido palabras y reproches para el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, por su pacto con el PSOE, a quien ha acusado de representar «la peor de las tradiciones políticas españolas» y podía haber sido perfectamente «el jefe de escuadra» después de la Guerra Civil. No obstante, ha reconocido sobre Rivera que es un político «hábil».

Sánchez: «Nosotros no jugamos con el terrorismo»

El líder de Podemos también ha arremetido duramente contra el pasado del PSOE y ha aconsejado a Sánchez que «desconfíe de los consejos de aquéllos que tienen manchado su pasado de cal viva». Una dura acusación, que ha aludido a Felipe González, presidente del Gobierno bajo cuyo mandato se produjo uno de los episodios más negros de los GAL.

A lo que Sánchez ha contestado: «Me siento muy orgulloso de Felipe González». Asimismo le ha dicho que en el PSOE «no jugamos con el terrorismo. Lo hemos sufrido en nuestras filas. Y en España no hay presos políticos».

Contrarréplica

Por otro lado, Iglesias ha pedido al PSOE que defienda un empleo de calidad y no la «precariedad» con unas medidas laborales que mantienen las mismas indemnizaciones que las que contempla la reforma laboral de 2012, aprobada por el Partido Popular.

«La próxima vez, mande a un socialista para hablar de economía» cuando conforme su programa económico, le ha dicho a Sánchez, lanzándole el empellón a Jordi Sevilla.

Iglesias también ha confirmado su voto en contra del candidato socialista.

El podemita ha señalado a Sánchez que en el tema de las pensiones, muchas familias estiran su paga para ayudar a sus familiares, y le ha pedido que no tenga un «conformismo liberal», que nada tiene que ver con el liberalismo revolucionario.

Ha vuelto a pedir a Sánchez medidas como la dación en pago retroactiva, los alquileres sociales para los desahuciados y el fin de la acaparación de viviendas sociales, así como el derecho a la luz y al agua.

También le ha criticado al socialista en materia laboral y le ha dicho que «no se extrañe que cualquier día los trabajadores le pidan que entreguen la S y la O del PSOE».

Iglesias le ha pedido a Sánchez que rectifique y trate a su partido como socios con el que se comparten responsabilidades. «No trate de engañarnos», ha expresado. «No hay en nuestra dignidad ni en nuestra firmeza ningún ánimo de revancha. Nuestra lealtad será igual de firme si rectifican ustedes y se ponen de acuerdo con nosotros. El tiempo del bipartidismo se acabó», ha manifestado Iglesias.

El podemita ha puesto fin a su discurso en el debate de investidura de Pedro Sánchez con el puño en alto, al grito de «libertad, justicia y democracia».

«No voy a permitir que la gobernabilidad de España descanse en independentistas»

Sánchez ha asegurado que no va a permitir que la gobernabilidad del país descanse en partidos independentistas, y le ha pedido a Iglesias que no se engañe y que deje de repetir que hay una mayoría de izquierdas en el país, porque no es cierto, ya que partidos como ERC son independentistas.

«Yo no voy a permitir, con todo el respeto a ERC, que la gobernabilidad de España descanse en partidos independentistas», ha expresado, aunque también ha dicho que nada le hubiera gustado más que un Gobierno de izquierdas, pero no hay mayoría.

Iglesias critica la actitud «miserable» e «impropia» de Sánchez

Por su parte, Iglesias de forma dura ha calificando la actitud de Sánchez de «miserable» e «impropia» por utilizar la memoria de las víctimas del terrorismo para atacar a un rival político.

Iglesias ha pedido a Sánchez que rectifique su pacto con Ciudadanos, a quien se ha referido en varias ocasiones como «naranja mecánica». Así le ha tendido la mano de nuevo de Podemos para negociar y evitar que el poder acabe en manos de las oligarquías y el PP por su pacto con C’s.

«Aún puede rectificar y ser presidente», ha expresado. Asimismo, Podemos ha prometido no olvidar los desahucios, la corrupción, la privatización de la sanidad o la reforma laboral. «Yo no traiciono a mi gente, señor Sánchez», ha advertido Iglesias, quien también le ha reprochado al socialista que su pacto con C’s no revierte los recortes, no prohíbe los desalojos forzosos, no contempla la dación en pago retroactiva, no acaba con el copago sanitario y elude la derogación de la Lomce, como reclama la formación morada.

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