Los contagios repuntaron y las altas se desaceleraron en Madrid durante el cierre impuesto por Sánchez

¿Fue eficaz el confinamiento forzoso decretado por Moncloa sobre Madrid en la segunda quincena de octubre? En vista a los datos de evolución epidemiológica que ahora se conocen, no lo parece. De hecho, la medida rompió una tendencia a la baja en contagios que se venía registrando desde cuatro semanas antes: la segunda semana del confinamiento, en la que se agudizaron los efectos del cierre, los contagios crecieron un 2,7%. Una vez se levantó el confinamiento del Gobierno, la bajada de contagios volvió a acelerarse. Situación parecida se dio respecto a las nuevas hospitalizaciones, que acumulaban 3 semanas a ritmo de fuerte descenso y en la semana del 16 al 22 de octubre se frenó, recuperando de nuevo el ritmo anterior una vez levantado el estado de alarma.

Madrid lleva ya dos meses en una montaña rusa de medidas y restricciones, algunas aplicadas por la Comunidad que preside Isabel Díaz Ayuso y otras decretadas forzosamente por parte del Gobierno. Hasta ahora era muy complejo obtener una fotografía aproximada de la evolución de contagios respecto a cada una de las fases de restricción, en parte por los retrasos de notificación de casos. Ahora, con vista retrospectiva de las estadísticas oficiales de la Comunidad de Madrid y del Ministerio de Sanidad, pueden comprobarse las tendencias a la baja -y al alza- que se dieron en las últimas 7 semanas.

Primeras restricciones de Ayuso

En la semana del 18 al 24 de septiembre -la última sin restricciones de movilidad de ningún tipo-, los contagios semanales en la Comunidad se situaron en 25.414 y los nuevos hospitalizados en 2.645. El 21 de septiembre entraron en vigor las medidas de restricción en zonas sanitarias básicas, el modelo de intervención quirúrgico por el que ha venido apostando el Gobierno madrileño de Díaz Ayuso. Medidas que incluso han sido señaladas como eficaces por parte del Ministerio de Sanidad francés.

En esa primera semana de restricciones, entre el día 24 y el 1 de octubre los nuevos casos semanales caen hasta los 19.200, un descenso intersemanal por encima del 32%. Las nuevas hospitalizaciones caen a 2.462.

El confinamiento fallido de Illa

La bajada de casos continúa la siguiente semana, en la que transcurre del 2 al 8 de octubre, a un ritmo del 24,5% con 15.420 nuevos contagios. Los nuevos hospitalizados bajan a 2.102, un 17% en una semana.

En esos días, Madrid permanecía confinada -aunque sin efectos legales ni tampoco punitivos, ya que no hubo multas- por la orden ministerial firmada por el titular de Sanidad, Salvador Illa. Una instrucción que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid tumbó a mitad de semana, dejándola sin efecto.

Por aquel entonces, la Comunidad de Madrid y el Gobierno central habían iniciado una batalla por los datos. Mientras desde Madrid se aseguraba que las restricciones impuestas a nivel regional estaban dando resultados, Sanidad alegaba que los datos no eran fiables, que se había dejado de hacer test o que incluso se falseaban con retrasos de notificación (pese a que Sanidad y el CCAES de Fernando Simón llegaron a inflar artificialmente en un sólo día 11.000 contagios, que desaparecieron en 48 horas).

Argumentos de los que más tarde se retractaría Sanidad. Sin embargo, el viernes 9 de octubre Madrid quedó confinada, al medio día, por la declaración de un estado de alarma parcial y tramitado por urgencia en el Consejo de Ministros Extraordinario de esa mañana. Madrid quedaba confinada ese puente del 12 de octubre.

A partir de ese momento no se podía salir de la ciudad de Madrid -y de otros 8 grandes municipios- pero sí se permitía la movilidad en su interior. Hecho que algunos expertos  consideraron un error, ya que la transmisión del virus se abría en las zonas de mayor incidencia hacia zonas de menor riesgo de contagio. En esa semana  se registraron 12.043 casos, un 28% menos. Las nuevas hospitalizaciones cayeron a 1.941.

Madrid, confinada por Sánchez

La siguiente semana, del 15 al 22 de octubre, la segunda con la declaración de alarma ad hoc para Madrid, rompió las estadísticas. Lo que durante cuatro semanas habían sido números verdes, se convirtieron en rojos. Madrid registró un aumento intersemanal de 303 nuevos casos más que la anterior. Un aumento del 2,7%.

Llamativas también las cifras que se registraron esos días en los nuevos ingresos hospitalarios. De 1.941 ingresos se bajó a 1.933. Un total de 8 pacientes menos, cuando en las semanas anteriores había bajado a ritmos de 183, 360 y 161 pacientes menos. Incluso las UCI repuntan esa semana, pasando de 179 ingresos en la anterior a 208 (29 más) en esa semana, en pleno confinamiento del Gobierno. La factura mortal del Covid en Madrid que había bajado en las dos semanas precedentes, también sube: 9 muertos más respecto a la anterior (de 246 a 255 fallecidos en una semana).

Se levanta el cierre de Sánchez

El fin de semana del 24 y 25 de octubre finaliza el estado de alarma de 15 días impuesto a Madrid. La capital y los otros 8 municipios afectados recuperan la normalidad -exceptuando las zonas sanitarias básicas que continuaron bajo las medidas regionales-. Hasta el 29 de octubre, Madrid registra esa semana de nuevo datos positivos: los nuevos contagios caen hasta los aproximadamente 10.500, un 17% respecto a la anterior semana.  Se recupera también la mejoría en hospitalizados, con 1.821 nuevos ingresados (112 pacientes menos y un 6% de descenso respecto a la anterior).

Una tendencia que tampoco se frena en la siguiente semana, del 30 de octubre al 5 de noviembre. Es más, se acelera, recuperando las bajadas por encima del 30% que se registraban en la última semana de septiembre, cuando las medidas aplicadas por el Gobierno de Díaz Ayuso no contaban con la oposición frontal del Ministerio de Sanidad ni de Moncloa. En esa última semana analizada, los nuevos casos caen hasta los 8.107 y las hospitalizaciones bajan a 1.606 (215 menos).