Ciudadanos estudia abandonar el Parlament cuando se debata la declaración de independencia
Ciudadanos está estudiando la posibilidad de que sus 25 diputados autonómicos abandonen el Pleno del Parlament del próximo lunes, cuando se debata la declaración institucional en la que Junts pel Sí y la CUP anuncian el inicio del proceso de independencia.
Con este gesto, la formación política de Albert Rivera (que tras las elecciones del 27S ha asumido el papel de principal partido de la oposición) quiere poner en evidencia que la Cámara autonómica no está legitimada para aprobar una resolución que quiebra abiertamente la Constitución española.
Ciudadanos, PSC y PP recurrieron ante el Tribunal Constitucional la declaración en la que Junts pel Sí y la CUP anuncian, además, de ahora en adelante las instituciones catalanas se situarán al margen del Estado de Derecho y no obedecerán a las leyes españolas, ni a las sentencias de la Justicia española.
El Constitucional admitió a trámite el jueves los tres recursos de los grupos de la oposición de la Cámara autonómica, pero rechazó suspender la celebración del Pleno del próximo lunes.
Los once magistrados del TC advierten en su resolución que es la propia Cámara autonómica la que debe velar para que «su actuación se desarrolle en el marco de la Constitución”, sin perjuicio de lo que pueda resolver en última instancia el alto Tribunal.
La investidura de Artur Mas, en el aire
Porque si finalmente prospera el recurso presentado por Ciudadanos, PSC y PP, quedará automáticamente anulada la declaración ilegal, con la que Artur Mas pretende ganarse el respaldo de la CUP para ser investido de nuevo como presidente de la Generalitat.
Algo que no tiene garantizado en estos momentos. Por ello, Convergencia tiene puestas ahora sus esperanzas en que al menos dos diputados autonómicos de la CUP o de Catalunya Sí que es Pot (la marca blanca de Podemos) se abstengan o decidan ausentarse del Pleno de investidura. En este supuesto, los 62 escaños de Junts pel Sí serían suficientes para que Artur Mas sea elegido presidente.
Mientras tanto, el Gobierno de Mariano Rajoy sigue adelante con su propia hoja de ruta para detener el proceso de independencia, utilizando para ello todas las armas legales que ofrece el ordenamiento jurídico.
Como ha informado OkDiario, el Artur Mas mantiene su pulso al Estado de Derecho, el Ejecutivo central aplicará el artículo 155 de la Constitución para destituirle como presidente de la Generalitat. De este modo, la Administración autonómica quedaría «intervenida», bajo la dirección de la delegada del Gobierno en Cataluña, María Llanos de Luna, hasta que se restablezca la legalidad.
A ello hay que sumar la reforma del Tribunal Constitucional puesta en marcha por el PP, que permitiría inhabilitar a Artur Mas para ocupar cargos públicos, si desobedece las sentencias del alto Tribunal.