Caos de los contratos de 60 millones de Óscar López en Paradores: algunos no llevaban ni firma
López era el presidente de Paradores cuando José Luis Ábalos organizó una fiesta en el hotel de Teruel


El Tribunal de Cuentas detectó numerosas «deficiencias» en los contratos de Paradores durante la etapa de Óscar López como presidente. En el informe de fiscalización emitido el año pasado, y que supervisa los contratos de 2020 y 2021, se destaca, por ejemplo, que algunas firmas son «ilegibles» y que en varios expedientes «no consta el nombre de la persona que firma como visto bueno del presidente». En el trámite de alegaciones, Paradores admitió: «El presidente es Óscar López Águeda y efectivamente no figura en el pie su firma», pero trató de justificar que «tanto la suya como la del secretario general obran reconocidas y verificadas en la diversidad de documentos financieros y notariales de la sociedad».
En concreto, el organismo fiscalizador encontró «importantes deficiencias en la motivación de las valoraciones y en el cumplimiento» de la Ley de Contratos, especialmente relacionadas con «la inexistencia de subcriterios, falta de exigencia de motivación en la asignación de puntuaciones y ausencia de criterios» que garantizasen la oferta que representaba la mejor relación calidad-precio. También destaca las irregularidades que impiden la «competencia efectiva» en los contratos.
En el periodo analizado, Paradores formalizó 711 contratos por 59,8 millones de euros, de los cuales 329 eran menores. El Tribunal de Cuentas también reveló un «amplio margen de discrecionalidad en la asignación de puntuaciones», así como «la falta de observancia de sus normas internas de control de gasto, y la obsolescencia y falta de coordinación entre los sistemas de información para procedimientos de contratación».
También se señala que «en ninguno de los contratos de obras fiscalizados se concretó la fecha de inicio de los trabajos» ni «plazo para su realización». Además, en algunos de ellos «la realización de la prestación se efectuó fuera del plazo de ejecución». Paradores no remitió documentación para acreditar las actuaciones llevadas a cabo para verificar el cumplimiento de las obligaciones de los contratos.
«Cata a ciegas»
El Tribunal de Cuentas también analizó los contratos marco suscritos para el suministro de frutas, verduras y pescado. Resulta llamativo, por ejemplo, que «para seleccionar a los licitadores se utilizaba como único criterio de valoración una cata a ciegas de una muestra de los productos ofertados por los licitadores».
En esas catas intervenían «tres personas de cada Parador, pero no siempre pertenecientes todas ellas al área de restauración». Para ello, se seleccionaban «cuatro productos de la lista de 144 que acompañaba a los pliegos» lo que, según el Tribunal de Cuentas, resulta «poco representativo».
«De cada producto se valoraban distintos aspectos, aunque no se establecían subcriterios para baremar la puntuación, ni se exigía ninguna motivación en la asignación de los puntos, lo que daba lugar a un excesivo margen de discrecionalidad en su asignación que supone una vulneración de los principios de transparencia y libre competencia».
La fiesta de Ábalos
Paradores ha saltado ahora a la actualidad informativa tras revelar OKDIARIO que el entonces ministro José Luis Ábalos montó una fiesta con «señoritas» en el parador de Teruel en plena pandemia. El escándalo ha sido corroborado por numerosos testimonios internos, como el de uno de los empleados, que atestigua que «dejó la habitación destrozada». El caso tuvo lugar el 15 de septiembre de 2020.
Según el relato, las acompañantes de Ábalos llegaron en una furgoneta junto al ministro y su comitiva y fueron las limpiadoras del hotel las que dieron la alerta del estado de la suite de la segunda planta, donde se había alojado el ministro. Dijeron: «Es mejor que no preguntéis, han dejado destrozadas las habitaciones», según narra otro empleado del parador, que confirma los numerosos daños en las instalaciones, como consecuencia de una fiesta prolongada hasta altas horas de la madrugada.
Preguntado por este asunto, Óscar López -que entonces era el presidente de Paradores- atacó a OKDIARIO, calificándolo de «pseudomedio».
«Yo creo que lo que estamos viendo es un síntoma de nuestros tiempos que a mí me apena mucho», afirmó en una entrevista en Espejo Público.
En este contexto, señaló que le extrañaba «ver a un pedazo de periodista como [Carlos] Alsina», así como el programa en el que estaba siendo entrevistado «haciéndose eco de un medio» como este periódico que, desde su «punto de vista», es «un pseudomedio».