‘La Bestia’, así es el coche de 9 toneladas de Biden que resiste ataques de misiles y bombas
Ha sido popularmente bautizado como La Bestia (The Beast), y es el coche oficial del presidente de Estados Unidos, un Cadillac One que probablemente sea el automóvil más seguro del mundo, dadas sus características. El coche ha sido modificado para tener un blindaje de 20 centímetros de grosor en toda su carrocería. El vehículo del presidente Biden es capaz de aguantar ataques químicos, de granadas antitanque, bombas lapa e incluso de un misil del tipo Stinger. Todo ese equipamiento hace que el coche pese casi 9 toneladas y no alcance una velocidad superior a los 100 kilómetros por hora. Durante la cumbre de la OTAN se verá por las calles de Madrid.
Algunas de las características del coche de Biden que se podrá ver estos días por las calles de Madrid son secretas, pero otras se conocen bien, como el sistema de extinción de incendios, los neumáticos blindados antipinchazos, cámaras de visión nocturna y una célula especial de seguridad para los ocupantes del coche que permite aislarlos en caso de un ataque con armas químicas. El vehículo tiene capacidad para siete ocupantes distribuidos en dos delante, tres en medio y otros dos detrás. Además, el coche tiene otro gemelo, exactamente igual, incluso en los números de matrícula para confundir a posibles terroristas y siempre viajan uno al lado del otro. Se estima que su valor es de 1.500.000 dólares y en la matrícula lleva un 046, el número de presidente de Estados Unidos que hace Biden.
El coche no circula jamás solo, sino acompañado de otros 50 vehículos y unos 200 escoltas. Hay muchas imágenes del coche en redes sociales, unidas a críticas por el gasto en combustible y la contaminación que provoca esa comitiva. Todos los coches llegarán en aviones a la base de Torrejón de Ardoz, en Madrid. Hay varios SUV, berlinas, motocicletas y hasta microbuses. Algunos de estos microbuses llevan a bordo a los miembros del servicio secreto de Estados Unidos encargados de la guardia del presidente, pero en otros viajan miembros de Prensa que acompañan a Biden en sus viajes. Algunos de los camiones más grandes llevan armamento pesado a bordo y en uno de estos vehículos, se desconoce en cuál de ellos, viaja el archiconocido maletín nuclear.
El vehículo, construido por la americana General Motors, se renueva cada 10 años por un contrato con el constructor de 18.500.000 dólares, y este modelo que estarán en Madrid estos días es el mismo que usaba Donald Trump. El coche mide de largo 5,5 metros y tiene una altura de 1,78 metros, un motor de 300 caballos y alcanza una velocidad máxima de 100 kilómetros hora. Siempre que está fuera de Estados Unidos lleva en su lado izquierdo la bandera del país anfitrión.
La Bestia posee delante una cámara de visión nocturna y lanzadores de botes de humo. Las llantas de acero mantienen el vehículo en movimiento aunque las cuatro ruedas pinchasen. Todas las puertas están equipadas con sistemas antiincendios y ametralladoras para responder posibles ataques. Cada una de estas puertas pesa lo mismo que la de un Boeing 757. Los bajos están reforzados con planchas de acero que resistirían ataques con bombas y granadas. Los 20 centímetros de blindaje de acero y kevlar impiden bajar las ventanillas del vehículo, excepto la del conductor que se puede bajar solo 7 centímetros. A pesar de que a Biden le encanta conducir y todo lo relacionado con el motor, en esta ocasión, al igual que cuando transportan a la vicepresidenta Kamala Harris, es siempre un miembro del servicio secreto el que hace de chófer.
El coche preferido del presidente Joe Biden es un Chevrolet Corvette C2 Stingray, de 1967. Este Corvette, con un motor L79 V8 de 350 CV de potencia y transmisión manual de cuatro relaciones, es solo uno de los vehículos de Biden, que también guarda en su garaje un Playmouth Belvedere de 1956, un Jeep Wagoneer, un Chrysler 300D, un Mercedes-Benz 190 SL Roadster de los 50 con motor 1.9 de 105 CV. y un gran SUV Ford Expedition.