Almeida llama «¡a las barricadas!» por el aumento del precio de la luz, la gasolina y el gasóleo
«¡A las barricadas!». El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha agitado las redes sociales con un llamamiento a la movilización tras conocerse que la factura de la luz ha subido un 44%, la gasolina un 22,1% y el gasóleo un 23% en el último año.
El tuit del alcalde tira de ironía para denunciar la pasividad de los partidos y colectivos sociales de izquierda a la hora de protestar por el incremento de los precios de la energía. Es el caso de Podemos, que en el pasado (cuando gobernaba el PP, naturalmente) abanderó el activismo contra la «pobreza energética» que causaba «muertes».
Pablo Iglesias llegó a pedir que se guardara un minuto de silencio en el Congreso por las «víctimas de la pobreza energética», una expresión que ha caído en desuso ahora que Podemos contempla desde el Gobierno de España cómo la factura de la luz y los carburantes se disparan a niveles nunca conocidos, sin que por ello haya manifestaciones de protesta en las calles de Madrid.
El fuerte encarecimiento de la electricidad y los carburantes disparó la inflación en septiembre hasta el 4%, siete décimas más que en agosto y la tasa más alta desde 2008, según los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
¡A las barricadas! https://t.co/CP0GFOm0wP
— José Luis Martínez-Almeida (@AlmeidaPP_) October 14, 2021
El índice de precios de consumo (IPC) suma ya siete meses consecutivos al alza, seis de ellos con tasas crecientes por encima del 2 %: abril (2,2%), mayo (2,7%), junio (2,7%), julio (2,9%), agosto (3,3%) y ahora septiembre (4%).
El encarecimiento de los precios está provocado por el comportamiento de la energía, sobre todo la electricidad, que se disparó un 44% en septiembre con respecto al mismo mes de 2020.
La subida de la luz impactó de lleno en la evolución del grupo de vivienda, cuyos precios subieron un 14,5% en septiembre, tres puntos más que en agosto, debido tanto a este factor como al encarecimiento del gasóleo para calefacción y el gas, que bajaron en 2020.
También los precios de los combustibles líquidos subieron con fuerza, un 42,5 %, lo que impulsó la inflación del grupo de transporte al 9,8%, un punto más que en agosto, a pesar de que la liberación de algunos tramos de autopistas presionó a la baja (peajes y aparcamientos descendieron un 22,5%).