Un alcalde del BNG se pega un viaje a Pekin con tres ayudantes y uno se hace fotos semiporno

El alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), recogió este pasado fin de semana en China un premio al modelo de “movilidad amable” que se ha puesto en marcha en la ciudad gallega.

Hasta ahí, un reconocimiento para el sistema de planificación del tráfico en este ‘concello’. Pero la polémica se encuentra en que, lo que inicialmente era una invitación para una persona acabó convirtiéndose en realidad en un viaje oficial, a cargo del erario municipal, del que pudieron disfrutar tres acompañantes del regidor.

El viaje se convirtió en un ‘tour’ de cinco días, que acabó en Pekín, donde el regidor impartió una conferencia sobre el modelo urbano de la ciudad, organizado por la China Fortune Land Development, una empresa dedicada al diseño de nuevas ciudades y que tiene en el modelo pontevedrés un referente para limitar el número de coches que circulan por las vías urbanas.

Fuentes del Consistorio admiten que corrieron a cuenta del dinero público los billetes de avión de estos tres ‘extras’. En total, y siempre según esta versión, unos 1.800 euros (600 por pasaje de ida y vuelta). También según esas mismas fuentes, tanto el hotel como los distintos desplazamientos internos fueron sufragados por la organización del acto.

Además de Fernández Lores, la delegación estaba integrada por la concejala de Promoción de la Ciudad, Anabel Gulías, el jefe de la Policía Local, Daniel Macenlle y el responsable de comunicación, Antón Prieto, quien no dudó en dar buena cuenta de su viaje a través de su perfil personal de Instagram y con unos singulares ‘selfies’ en los que posa presumiendo de musculatura, y hasta desnudo dentro de la bañera del hotel.

Desde el equipo municipal se defiende que el viaje supone una oportunidad para la proyección internacional de Pontevedra, y una “ocasión única” para publicitar su modelo urbano en todo el mundo.

Viajes polémicos

Es la segunda vez que el alcalde pontevedrés viaja a China en los últimos doce meses para recoger un galardón por su modelo de ciudad sostenible. Y la segunda con polémica.

En la ocasión anterior, en noviembre pasado, la oposición calificó de «impresentable» el desplazamiento, al considerar una «tomadura de pelo» recoger un premio «dedicado a experiencias innovadoras a favor de rentabilizar transportes y reducir contaminación en una ciudad en donde el transporte público brilla por su ausencia».

Desde el PP criticaron además la falta de información facilitada a la oposición sobre el contenido del viaje y la agenda del regidor. «Esperemos que haya resultados a nivel empresarial o turístico y que no sirva solo para que el alcalde haga turismo», consideró el portavoz del PP, Jacobo Moreira.

También el año pasado, la oposición popular en el Consistorio denunció que un viaje de Lores a Dubai, también para recoger otro premio por su modelo urbano, supuso a las arcas municipales al menos 60.000 euros en gastos. Desde el PP aportaron hasta 16 facturas de este desplazamiento, entre ellas, la fiesta de celebración, que ascendió a 4.700 euros y que incluyó un evento de fuegos artificiales.

«Hago de mi vida privada lo que me apetezca»

En comunicación con OKDIARIO, Antón Prieto justifica que el viaje «es uno más de los bastantes desplazamientos de trabajo que se realizan para informar o debatir sobre la transformación de nuestra ciudad en un espacio sostenible y peatonal o para recoger alguno de los galardones que nos acreditan como un modelo a seguir».

Prieto detalla el planning de actos de la delegación en China y, en línea con lo publicado, admite también que el Ayuntamiento pagó los vuelos a la localidad china de Shenzhen. El resto de gastos corrieron a cargo de los organizadores de los distintos eventos.

El responsable de Comunicación del Consistorio pontevedrés se defiende además de la publicación de las fotografías, que él mismo subió en su cuenta de Instagram.

«Cuando a cualquier trabajador su empresa le desplaza a un lugar para trabajar allí, se entiende que fuera de sus obligaciones, su tiempo le pertenece a él mismo y hace con él lo que quiere, ejerciendo su libertad personal», afirma. Y añade: «Hice, hago y seguiré haciendo de mi vida privada lo que me apetezca, tanto en el aspecto presencial como en mis redes sociales».

Prieto asegura, además, que su conciencia está «absolutamente tranquila» tanto «en lo que se refiere a la dimensión moral que al parecer tanto preocupa, como a lo relativo al uso de dinero público, del que siempre hemos dado cuenta de forma rigurosa e invertido de manera austera y comedida».

«Por último, si a alguien le gustan mis fotos, no tiene más que enviarme las suyas. Quizá podamos admirarnos mutuamente, cuando menos», concluye.