Ahora Madrid dice que el tráfico es cuestión «de salud pública» pero el edil del ramo no lo atiende
La delegada de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Inés Sabanés, ha criticado que el PP haya propuesta tener en el Consistorio un edil dedicado en exclusiva al tráfico. La política ecologista dice que los atascos y la contaminación son un tema de «salud pública», sin embargo, Javier Barbero, concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, no ha comparecido una sola vez a explicar nada respecto a los protocolos de lucha contra la contaminación en estos días.
Sabanés ha admitido este miércoles que están trabajando en poder anticipar la comunicación de los índices de contaminación «un par de horas» para «facilitar la vida a los madrileños». No obstante, ha añadido que este miércoles «se ha puesto sobre la mesa este tema y las medidas, si se pueden anticipar, se harán, pero lo tiene que avalar la comisión correspondiente».
El concejal delegado del área de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, no está al tanto de los problemas diarios de congestión de vehículos así como la generación de gases nocivos para el ciudadano. Este mismo miércoles se presentaba el borrador del Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático del Ayuntamiento que únicamente ha contado con la presencia de Sabanés y José Manuel Calvo, concejal de Desarrollo Urbano Sostenible. Barbero ha preferido acompañar a la alcaldesa Carmena a visitar el CIE de Aluche sobre el que el Consistorio no tiene competencias.
Barbero en escasas ocasiones ha respondido sobre los atascos que vive Madrid, a pesar de que de él dependen la Policía Municipal y los agentes de movilidad. En cualquier caso, sobre contaminación y gases nocivos el de Madrid 129 –una de las infinitas familias de la izquierda radical en Madrid–no se suele pronunciar nunca, y deja que sean Sabanés y Calvo los que atiendan estas crisis.
La edil ex de Izquierda Unida ha argumentado, a cuenta de la polémica sobre las comunicaciones del Consistorio para avisar a los madrileños de si podrían coger el coche estos días de alta contaminación, que «es complicado elegir una fórmula de previsión anticipada de acuerdo con predicciones o dato cierto». Por contra, la delegada ha indicado que si se trabaja «para previsiones», éstas tienen «margen de error» que acabaría en que «seguramente la gente afectada también valoraría y podría impugnar o reclamar».
«Tratamos de buscar el modo de mejorar la última medición para que los madrileños estén informados antes, sin exponernos a riesgos; queremos que se vayan a dormir con una mejor previsión y sabiendo que son actores necesarios para luchar contra la contaminación», ha manifestado la delegada de Medio Ambiente y Movilidad.
Sabanés ha asegurado que aún no tiene datos sobre las sanciones impuestas, pero que el cumplimiento de las medidas ha sido «muy grande». «En las plazas de aparcamiento se ha cumplido prácticamente en un 90%», ha añadido. No obstante, tal como publicó OKDIARIO, a coches ecológicos con autorización para aparcar también se les ha multado con 90 euros.
La veterana política de Equo ha reiterado en su comparecencia que se trata de un tema de «salud pública» y que el protocolo responde a «un requerimiento que la Unión Europea ha hecho a Madrid por superar sistemáticamente límites permitidos y exponer la salud» de sus habitantes.
Limitar el tráfico en el centro
El borrador del Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático del Ayuntamiento de Madrid presentado este miércoles en Medialab Prado ha recogido 30 iniciativas. Incluye rebajar la velocidad de la M-30 y de los accesos a la capital a 70 kilómetros por hora incluso sin protocolo de emergencia, así como, aumentar los espacios para los peatones y bicicletas en los barrios de la capital.
Otro de los de los aspectos que más ha criticado la oposición es que se limite la entrada en el centro de la ciudad. En el punto 2 recoge «Rediseño de la sección en las principales vías de distribución del tráfico y vías de
conexión de los distritos de la periferia con el centro».
Explican que se propone intervenir en las calles de fácil penetración en la ciudad, literalmente, «reduciendo el espacio dedicado al automóvil a favor de los medios más sostenibles». Todo apunta a que al mantenerse la misma cantidad de coches que tienen que pasar por un espacio reducido se acentuaría el embotellamiento. No obstante, el Gobierno de Ahora Madrid dice que con esto «se persigue disuadir a los usuarios del vehículo privado del uso del viario central para atravesar la ciudad en viajes con origen y destino en la periferia».