Ada Colau pide «un nuevo pacto entre Cataluña y España» que incluya indultos a los presos
Ada Colau vuelve a hacer un llamamiento al diálogo entre instituciones y partidos para poner fin al conflicto catalán. Para ello propone «un nuevo pacto entre Cataluña y España» que se vote por todos los catalanes y que tenga unas condiciones previas como el indulto a los independentistas condenados.
Esta propuesta, que se desarrollaría en varias fases para superar el «bloqueo», ha sido presentada en Barcelona por la propia alcaldesa de Barcelona, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias y el candidato de los comunes a las generales, Jaume Asens.
La líder en En Comú Podem ha confesado que hasta después de las elecciones del próximo 10 de noviembre no será posible ningún acercamiento entre posturas y que lo que su partido propone es un pacto «de mínimos, no de máximos» para cuyo éxito tendría que superarse la «retórica testosterónica de vencedores y vencidos».
Colau defiende que hay que «abandonar las trincheras y ponernos de acuerdo en unos mínimos para esta nueva etapa».
Por su parte Asens ha dado mas detalles de esta propuesta. Asegura que el «gran pacto de país» debe llegar después de hacer ciertas cesiones, renuncias y flexibilidades por todas las partes. Aunque dice que nadie debe renunciar a objetivos políticos pero sí lo suficiente para llegar a un diálogo.
Asens detalla que el acuerdo tendría tres objetivos: blindar y reforzar el autogobierno de Cataluña, conseguir la libertad de los independentistas presos por el 1-O y abrir una mesa de diálogo que permita redactar una propuesta y votarla.
En esta primera fase que proponen los podemitas, habría que asegurar competencias como la educación y los Mossos, así como dar cumplimiento a los compromisos del Estado con Cataluña y abordar un nuevo modelo fiscal.
Sobre la libertad de los independentistas presos plantean dos fórmulas: «El indulto, que es una prerrogativa del ordenamiento español, que el próximo Consejo de Ministros podría aprobarlo y que se ha utilizado de forma recurrente», y reformar el Código Penal, concretamente del delito de sedición.
La mesa de diálogo defienden que sea sin líneas rojas para que se escuchen entre todas las partes con el objetivo de llegar a un acuerdo que «comprometa a todos y que se pueda llevar a cabo».
Escenificación del «desencuentro»
La alcaldesa de Barcelona critica que la mayoría de ciudadanos cree que «se está hablando de un diálogo de sordos» porque nunca se ha llevado a cabo, pero vuelve a defender que toda solución necesita diálogo.
Colau dice que las instituciones deben trabajar con discreción, serenidad y rigor para buscar el pacto y el encuentro y dejar de hacer promesas estériles y discursos en redes sociales o llamadas sin responder: «Dejen de escenificar permanentemente el desacuerdo».