Top Secret: Chanel ni cotiza en Bolsa ni hace públicas sus finanzas
Las cuentas de Chanel, así como los actuales propietarios de la maison de lujo, están rodeadas de gran secretismo. Hoy por hoy la compañía de lujo está en manos de los hermanos Alain y Gérard Wertheimer, dos empresarios que poco o nada se prodigan por las fiestas de la firma. Es más, durante los desfiles es probable verles en la cuarta o la quinta fila, fuera de las miradas curiosas.
Alain dirige el grupo desde su casa de Nueva York y Gérard, que vive en Ginebra, capitanea la unidad de relojes y joyas. Todo el accionariado de Chanel está en sus manos, no hay ningún conglomerado del lujo detrás como LVMH o PPR, llevan la compañía como si fuera una empresa familiar y con máxima discreción: ni cotiza en Bolsa ni se hacen públicos sus datos financieros. Pocas son las publicaciones que se han atrevido a dar una cifra, pero Bloomberg ha calculado el valor de la firma en unos 14.000 millones de euros.
El modelo de negocio creado por la diseñadora Coco Chanel a principios del siglo pasado sigue vigente. Inmaculada Urrea, consultora de moda de Sofoco Media explica que lo más importante de la francesa es que “cambió la manera de vestir de las mujeres, nunca fue empresaria, era una señora que hacía vestidos”. Sin embargo, creó un imperio que aún hoy es misterioso e imperecedero. Urrea señala que Coco Chanel decidió “liberar a las mujeres de cómo habían vestido hasta el momento, conectó con ellas y les dio lo que necesitaba”. Y añade: “Coincidiendo con la revolución y la liberación femenina, desde el punto de vista histórico”.
El modelo de negocio, el que ella conformó en el siglo pasado, iba paso a paso. “Una vez que afianza su estilo”, relata, “Chanel decide amplificar su negocio con dos cosas: el perfume y los complementos”. Una decisión que no es baladí, desde luego, pues hasta entonces los complementos “no habían tenido importancia porque siempre iban acompañando los vestidos”. Y, además, la decisión de Chanel iba más allá: “Ningún diseñador de Alta Costura había tenido su nombre en los complementos”, explica.
Chanel Nº5, una máquina de hacer dinero
El 5/5/1921 Chanel lanza su primer perfume, el Chanel Nº5. Urrea relata que para la creación de esta fragancia se asoció con unos perfumistas y encargó a Ernest Beaux, un reputado profesional del sector que había trabajado en la corte de los zares, un perfume de mujer “que huela a mujer”. Un año después, Beaux le presentó dos series de muestras numeradas, una del 1 al 5 y otra del 20 al 24. Chanel escogió el Nº5 para lanzarlo como su primer perfume, un número que coincidía con la fecha de presentación de sus colecciones.
La diseñadora gala “fue visionaria, pero de negocio no sabía nada”, eso sí, sus perfumes se vendían muy bien y sus creaciones tenían un estilo reconocible. Señalan desde Sofoco Media que “hacía lo que ella se pondría, supo explotar esto y aprovechar el momento en el que revolucionó”.
Fue la primera en ver un negocio en el mundo de los perfumes y los complementos, pues daba la oportunidad “a la mujer de la calle a tener acceso al mundo del lujo a través de un producto que podía comprar”. El modelo de negocio de Chanel, lejos de avejentar con los años, está más vigente que nunca.
Todo el mundo no se puede comprar un bolso Chanel 2.55, pero sí una laca de uñas o un pintalabios con las dos ‘ces’ entrecruzadas. La mujer normal accedió al lujo en los años 20 igual que lo hacemos casi un siglo más tarde, de hecho, los complementos y la cosmética tienen un gran peso en la cuenta de resultados de las grandes compañías de lujo en la actualidad.
Por ejemplo, en 2016 las ventas de perfumes y cosmética subieron un 6,5% y un 5,5%, respectivamente, según NPD Group. Las fragancias femeninas han sido las que han tirado del carro y en cosmética los maquillajes más vendidos han sido Chanel y Lancôme. Seguramente, sin las grandiosas ventas de los perfumes y la cosmética de Chanel el director creativo de la firma, Karl Lagerfeld, no podría permitirse los desfiles grandilocuentes durante la Semana de la Moda de París.
¿Cómo se relacionaba Coco Chanel con el dinero?
“Ya desde muy joven comprendí”, decía la diseñadora, “que sin dinero no se es nada y que con dinero se puede hacer todo. De lo contrario, había que depender de un marido. Estas consideraciones son banales en sí mismas, lo que importa es que descubrí estas realidades a los doce años”.
Se pueden hacer una idea del carácter poco convencional de esta creadora francesa, la única manera de tocar la libertad y no depender de un buen matrimonio es la independencia económica. Una mentalidad adelantada la de esta mujer, que “utilizó” a los hombres como socios/amantes capitalistas para conseguir ser independiente. “Siempre sacará algún provecho de los hombres con los que ha estado, aunque no siempre económicamente hablando”, comenta la consultora de Sofoco Media.
No olvidemos, comenta Urrea, que Chanel comenzó como sombrerera en un pequeño piso de París y tuvo como primer inversor a uno de sus amantes Étienne Balsan, un joven adinerado y burgués galo. Más tarde, sus primeros puntos de venta también se lo financiaría un hombre: el británico Arthur Capel con el que jamás se casó. “Entre el amor y el trabajo, siempre eligió éste último. No se puede tener todo”, apunta Urrea.
Irrumpe en la vida de los europeos la Primera Guerra Mundial, los adinerados huyen a sus segundas residencias ubicadas en Biarritz y Deauville, donde la creadora abrió dos tiendas. Al terminar la gran guerra, Chanel ya era rica, recuperó la inversión inicial y devolvió el dinero a Capel. Momento en el que le dijo: “Creí darte un juguete y te di la libertad”.
Chanel usó el dinero como un instrumento de libertad que dedicó a ser independiente. Para ella “el dinero era importante y que la empresa estuviera bien gestionada también. Fue una visionaria porque sabía invertir bien”, sentencia Urrea.
Temas:
- Sector lujo