Comprar una casa o ver un derbi: ¿cuánto están dispuestos a pagar los españoles por un evento?
El próximo 3 de diciembre tendrá lugar el partido de fútbol más esperado: el clásico Barça-Real Madrid. En algunas plataformas ya se venden las entradas, hay pases VIP por 13.000 euros, el precio más “realista”, ya que hay ofertas incluso por 110.000 euros, según declaraciones de Matan Ganani, CEO y fundador de Never Empty, a OKDIARIO. “No quiere decir que se vaya a pagar eso por ellas, pero en este momento así está publicado. Hace un año se habló de que la entrada más cara pagada para este partido estuvo en 2.950 euros”.
El precio más caro registrado que se ha llegado a pagar en España por una entrada fue en 2014 para el concierto de los Rolling Stones, se pagó por una entrada 12.000 euros, asegura el experto. El ejemplo más reciente es el del pasado concierto de Justin Bieber esta semana, el ticket más caro rondaba los 90 euros y en algunos casos se ofertó hasta por 3.000 euros.
Matan Ganani: «En 2015 la entrada más cara fue para el concierto de Enrique Iglesias por 1.600€»
No existe un ranking fiable para este tipo de venta porque hablamos de entradas vendidas y compradas entre terceros, “pero a comienzos de año se mencionó que la entrada más cara a través de una plataforma de reventa en 2015, fue para el concierto de Enrique Iglesias en Marbella por 1.600 euros. La segunda fue coincidentemente para uno de su padre por 1.550 euros”.
Bajo la situación legal actual, es un negocio altamente rentable que beneficia a terceros, a partir de un producto creado gracias a la inversión y el esfuerzo de otros, asegura Ganani. “No se puede decir que sea un timo el ofertar una entrada a un precio y que alguien decida pagar por ella, por muy absurdo que sea su valor”.
Desde Never Empty creen que se puede “evitar” o “desincentivar”, ellos no creen en la prohibición porque “sería relativamente sencillo cambiar la ley y bloquear estos sitios web. Pero lo cierto es que existe un mercado, y como tal, si se ilegaliza vendrán otro tipo de alternativas para suplir ese mercado”.
“La trampa, más bien, está en que estas entradas a la reventa no son de personas de buena voluntad que por razones de fuerza mayor, no pueden asistir al evento y quieren vender su entrada. Son entradas compradas al canal oficial por especuladores y robots informáticos (bots), para ponerlas a la reventa de manera inmediata a precios ferozmente inflados”, concluye el experto.