¿Por qué sube el precio de la luz?
El precio de la luz sigue imparable y a llegado a alcanzar los 545€/MWh, subiendo más de 100 euros en tan solo 24 euros. Unos precios desorbitados que asustan más al escuchar a los expertos, que aseguran que el recibo de los españoles puede alcanzar los 2.000 euros este año debido a la inflación y la guerra. Muchos españoles tendrán que hacer frente a facturas de la luz desorbitadas mientras el Gobierno sigue sin ponerse de acuerdo para frenar la escalada. Ante esto muchos consumidores se preguntan: ¿a qué se debe la subida diaria del coste de la luz?
A la espera de las medidas políticas que pueda tomar el Gobierno para aminorar el efecto de estos altos precios en los recibos que pagan las familias, marzo va encamino de marcar otro nuevo récord histórico tras meses y meses de subidas en la factura de la luz.
¿Por qué sube el precio de la luz?
Desde que el pasado 1 de junio entrase en vigor el ‘tarifazo’ de Pedro Sánchez los máximos en el precio de la luz han sido cíclicos y constantes. El alto precio de la electricidad es consecuencia de los precios récord que se están registrando en el mercado mayorista de la electricidad, donde se realizan las transacciones eléctricas.
Asimismo, el alza registrada en el precio del gas natural también esta siendo otro de los factores determinantes en el incremento del precio de la luz y la guerra entre Rusia y Ucrania no está ayudando a esto. El precio del gas natural se ha disparado marcando nuevos máximos históricos por encima de los 30o €/MWh. Por su parte, los derechos del CO2 han experimentado una subida de más de un 100 % en tan solo seis meses, algo que afecta en los precios eléctricos diarios en Europa.
Pasividad del Gobierno
Esa espiral alcista ha llevado a focalizar el debate político en cómo abaratar el precio de la electricidad. De hecho, el Gobierno abrió la puerta a crear una empresa pública energética, tal y como viene desde hace tiempo pidiendo su socio en el Ejecutivo, Unidas Podemos. Así, la formación morada ha realizado una última propuesta al Gobierno para abaratar la factura de la luz que pasa por limitar el precio de la energía nuclear e hidroeléctrica mediante decreto ley.
Este contexto de subidas en el ‘pool’ eléctrico está marcado por el incremento en los precios de los derechos de CO2 y del gas, a los que se ha unido el incremento de la demanda por las bajas temperaturas y una menor contribución de las renovables, especialmente la eólica por la ausencia de viento. En concreto, los derechos de emisión de CO2 se han encarecido y rozan los 56 euros por tonelada en lo que va de agosto, cuando a principios de año cotizaban en torno a los 33 euros. Mientras, el precio del gas natural se sitúa en torno a los 47 euros por MWh, según datos de Mibgas.
El precio de la energía tiene un peso cercano en la factura de en torno al 24%, mientras que alrededor del 50-55% corresponde a los peajes -el coste de las redes de transporte y distribución- y cargos -los costes asociados al fomento de las renovables, a las extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa- y el resto, a impuestos.