La presión de Macron amenaza la llegada a España de la plataforma para fabricar eléctricos de Stellantis
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El sector de la automoción en España en jaque ante la presión del Gobierno de Emmanuel Macron a Stellantis que amenaza, no sólo la producción del e-208 en la planta de Figueruelas (Zaragoza), sino también la llegada de la plataforma STLA SMALL a las fábricas del grupo en España, lo que compromete la viabilidad de las instalaciones para los próximos años, ya que está es la ingeniería gracias a la cual se producen los vehículos eléctricos pequeños. Una estratégica del Ejecutivo galo que se enmarca dentro del plan para atraer la producción de coches a Francia de todas aquellas marcas francesas que, por competitividad, han apostado por ensamblar sus coches fuera a la que por el momento no ha contestado el ministerio de Industria Pedro Sánchez.
Así lo han confirmado fuentes cercanas a la negociación que han señalado que «desde que se anunciaron las nuevas plataformas para la producción de los modelos eléctricos del Grupo Stellantis, el sector dio por hecho que la ingeniaría encargada de montar los coches pequeños, esto es STLA Small, vendría a España, ya que son las instalaciones donde más rentable le sale al fabricante ensamblar los coches de estas dimensiones, y las instalaciones francesas se quedarían con la medium».
«Sin embargo, ahora Francia, con un 6% del peso en el consejo de administración del grupo, quiere las dos para garantizar que los fabricantes de las marcas galas producen en territorio francés los coches que decidirán la movilidad del futuro», aseguran.
Una postura que, según las citadas fuentes, «amenaza la carrera de España por una plataforma vital para la viabilidad de las factorías que producen la mitad de los coches que se hacen en España y emplean a más de 10.000 personas en sus instalaciones».
Las plataformas del futuro de Stellantis
En concreto, STLA Small, es la arquitectura dedicada a los vehículos más pequeños del grupo. Esta plataforma ofrecerá longitudes de carrocería de entre 3,5 y 4,2 metros y estarán impulsados por un motor de 70 kW (95 CV). Ocasionalmente, podrán equipar motores de entre 125 kW (170 CV) y 180 kW (245 CV). Las baterías tendrán capacidades que oscilarán entre los 37 y 82 kWh, y podrán recorrer hasta 500 km con una sola carga.
Una ingeniería en la que está previsto que se ensamble el Peugeot e-208 en la planta de Figueruelas en Zaragoza, en la que actualmente se produce la versión eléctrica del nuevo Corsa, pero con la plataforma antigua.
Mientras, la plataforma STLA Medium será la dedicada para los vehículos premium y que ya se ha confirmado que se quedará en Francia. Los modelos que salgan de esta ingeniaría tendrán una longitud de entre 4,2 y 5,0 metros, baterías de entre 87 y 104 kWh, y autonomías de hasta 700 km. Los motores eléctricos tendrán potencias de entre 125 kW (170 CV) y 180 kW (245 CV), aunque se podría alcanzar hasta 330 kW (449 CV).
Macron y su lucha con Stellantis
Macron quiere las dos, pero Stellantis ya ha confirmado al Gobierno francés, en una reunión privada con el ministro de Economía, Bruno Le Maire, que tomar esta decisión sería un suicidio para el grupo, ya que es económicamente inviable, porque las instalaciones en las que se ensamblan los coches de Citroën o Peugeot en España tiene una competitividad más elevada que las francesas.