El precio de la vivienda bajará hasta un 5,5 % el próximo año por el covid-19
El coronavirus sigue mostrando sus efectos en el mercado inmobiliario. El precio de la vivienda bajará el 3 % en 2020, el 5,5 % en 2021 y el 5 % en 2022, según las últimas previsiones de Euroval. La tasadora también señala que habrá que esperar hasta 2023 para que el mercado recupere las cifras ‘precovid’ similares a las de 2019.
La principal conclusión del estudio elaborado por Euroval es que la crisis del coronavirus ha frenado en seco la curva alcista de los últimos cinco años y que la hará descender durante un trienio, hasta situar el precio del metro cuadrado a niveles de 2014-2015.
En declaraciones a Efe, el analista principal del Instituto de Análisis Inmobiliario de Euroval, Alejandro Belchí, ha señalado que en Madrid y Barcelona -los mercados más caros- los precios no bajarán, sino que lo previsible es que se produzca un «estancamiento», al no ser tan alta la presión de la demanda.
Su estimación es que el precio medio del metro cuadrado descenderá a nivel nacional hasta los 1.606 euros en el cuatro trimestre de 2020, hasta los 1.563 euros en el mismo periodo de 2021 y los 1.570 euros en 2022, con respecto al valor del cuarto trimestre de 2019, que fue de 1.653 euros el metro cuadrado.
El estudio se refiere a precio tasado tanto de vivienda nueva como usada, aunque es esta última la que acusará el mayor impacto.
Belchí cree que la obra nueva seguirá desarrollándose conforme a la previsión anterior al parón de la actividad económica, ya que las operaciones precontratadas no acusarán variaciones significativas.
«Entendemos que este año no bajará el precio de la vivienda nueva, ya que hay muchas operaciones ya cerradas, con precontratos y contratos en los que ya está el precio fijado. En años venideros sí que consideramos que va a haber alguna rebaja», explica.
Aunque, a su juicio, se van a «paralizar muchas finalizaciones» de obra, este experto recuerda que también cabe la posibilidad de que mucha vivienda nueva se vaya al mercado de alquiler, si el Gobierno toma medidas para fomentar el arrendamiento.
En principio, la tasadora prevé una reducción lineal del 10 % en las existencias de vivienda nueva, similar a la que viene registrándose en los últimos años.
Las mayores bajadas de precio se darán en la vivienda usada, que representa en torno al 80 % del volumen total de compraventas en España, y que ya ha empezado a experimentar una caída de operaciones.
La proyección de Euroval se basa en un modelo que tiene en cuenta el tipo medio bancario, el «stock» residencial existente, la tasa de empleo y la propia evolución de los precios residenciales.
Belchí recuerda que tradicionalmente el precio de la vivienda en España ha estado muy ligado al número de ocupados y que la CEOE prevé una tasa de desempleo del 19,5 % para 2020 y del 21 % para 2021, si bien el estudio será objeto de reajustes en función de nuevos datos.
En cuanto a los tipos hipotecarios, el modelo parte de un 1,805 en el último trimestre de 2019 y prevé una reducción de hasta el 1,700 en 2020, del 1,650 en 2021 y del 1.625 en 2022.