María Jesús Montero repite como ministra de Hacienda y será vicepresidenta cuarta
Entre los retos de Montero durante la legislatura están la reducción del déficit y de la deuda pública
María Jesús Montero repetirá como ministra de Hacienda en el nuevo Gobierno de coalición entre el PSOE y Sumar y además ostentará la vicepresidencia cuarta del Gobierno. Entre su retos más inmediatos, Montero tendrá que acometer, después de tres años de reglas fiscales suspendidas, la reducción del déficit y de la deuda pública, que supera el 100% del PIB.
Montero, actual vicesecretaria general del PSOE y una de las artífices de los acuerdos de Gobierno entre el PSOE y el resto de partidos, es licenciada en Medicina y Cirugía. Ostentó la cartera de Hacienda y Administración Pública en la Junta de Andalucía desde 2013, departamento al que llegó tras pasar nueve años al frente de la Consejería de Salud, a la que accedió en 2004 de la mano de Manuel Chaves.
A este cargo accedió tras ejercer desde 2002 como viceconsejera del mismo departamento. Anteriormente, fue subdirectora médica del Hospital Universitario Virgen de Valme de Sevilla entre 1995 y 1998. En este año se incorporó al complejo sanitario Virgen del Rocío de la misma ciudad, primero como subdirectora médica y posteriormente como subdirectora gerente.
Los retos de Montero
El reto más inmediato del que tendrá que encargarse Montero será la elaboración y presentación del límite de gasto no financiero (techo de gasto), previo al proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2024, teniendo en cuenta que Bruselas prevé reactivar las reglas fiscales este próximo año, tras la parálisis por el impacto económico de la pandemia, la guerra en Ucrania y la escalada de precios, espacialmente energéticos, según informa Europa Press.
Por ello, y ante un arco parlamentario tan fragmentado, tendrá que esforzarse por recabar los apoyos suficientes para que, por cuarto año consecutivo, puedan ver la luz unas nuevas cuentas públicas en España para el año 2024.
El plan presupuestario remitido por el Ejecutivo a Bruselas el pasado mes de octubre ya incluye una previsión de déficit en el entorno del 3% para el año próximo -en línea con lo que fijarán las reglas europeas- y una ratio de deuda pública el próximo año del 106,3%, lo que supondrá una reducción de 14 puntos respecto a su valor en 2020, si es que el nuevo Gobierno lo consigue.
Ante un contexto tan incierto, también se tendrá que perfilar la prórroga de algunas de las medidas excepcionales para hacer frente al impacto económico de la guerra en Ucrania y la subida de precios. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya ha adelantado la prórroga de la rebaja del IVA a alimentos -que terminaba el 31 diciembre- hasta junio de 2024, seis meses más.
Impuestazos
Además, el acuerdo entre PSOE y Sumar recoge la revisión de los impuestos a la banca y empresas energéticas, con el objetivo de readaptarlos y mantenerlos una vez que expire su periodo de aplicación actual, para que ambos sectores «sigan contribuyendo a la justicia fiscal y al sostenimiento del Estado de bienestar».
También se evaluarán los resultados del Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas con el objetivo de avanzar hacia una nueva tributación de la riqueza en el marco del modelo de financiación autonómica para acabar con la competencia fiscal desleal entre territorios.
Asimismo, se fijará un tipo del 15% en el Impuesto de Sociedades sobre el resultado contable -en lugar de sobre la base imponible como hasta ahora- para recaudar 10.000 millones adicionales.