El Gobierno recorta cuatro décimas su estimación de crecimiento económico para 2024 y la sitúa en el 2%
El ministerio de Nadia Calviño eleva la previsión de mejora del PIB en tres décimas para este mismo año hasta el 2,4%
El FMI reduce sus previsiones de crecimiento para España en 2024 hasta el 1,7%
Continúan los signos de ralentización económica
El Gobierno en funciones asume que la marcha de la economía se ralentizará el próximo año y recorta en cuatro décimas su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de España para situarlo en el 2%. Las previsiones para el año en curso, sin embargo, suben en tres décimas hasta el 2,4%, por encima de la proyección anterior.
El Gobierno ha remitido el Plan Presupuestario de 2024 a la Comisión Europea, donde se incluye una previsión de déficit en el entorno del 3% para el año próximo y una ratio de deuda pública por debajo del 110% del PIB ya para 2023 (108,1%).
Como cada mediados de octubre, el Ministerio de Asuntos Económicos y transformación Digital que lidera Nadia Calviño -en funciones- ha enviado a l este informe en cumplimiento con las normas comunitarias. El texto con destino a Bruselas cuenta, tanto con las previsiones del cuadro macroeconómico, en las que se incluye la evolución prevista del PIB de España, como con la evolución de las finanzas públicas del país y el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Desde el Ejecutivo explican que, en 2023, el efecto de una política monetaria más contractiva de lo esperado se compensará con la sorpresa positiva de las exportaciones de servicios no turísticos.
Las estimaciones apuntan a que el PIB español, durante esta última mitad del año, refleja ya una desaceleración por la contracción monetaria. Como apuntan los datos más recientes este freno en el crecimiento se debe principalmente a la desaceleración del consumo privado como consecuencia directa del endurecimiento de las condiciones monetarias. Por otro lado, la economía española sufriría el impacto directo de la política monetaria contractiva a través de la demanda exterior.
El Gobierno asegura el dinamismo
De su lado, el menor crecimiento proyectado para la zona euro explica la revisión a la baja en el crecimiento del PIB para 2024 en España mientras el consumo y la inversión aceleran su crecimiento. A pesar del endurecimiento de las condiciones monetarias más duro del esperado, la Economía española mantendrá su dinamismo, defiende el Gobierno.
En 2024, el crecimiento del PIB pasará a descansar en la demanda nacional, así como en la moderación de la demanda externa por el debilitamiento de los socios comerciales.
Aceleración de consumo e inversión
El Ejecutivo señala que la aceleración prevista del consumo y la inversión en 2024 se sustenta en el despliegue del Plan, el dinamismo del mercado laboral y la solvencia financiera de hogares y empresas, cuya deuda ha alcanzado niveles mínimos desde 2002 según las cuentas financieras del segundo trimestre.
La AIReF señala «riesgo a la baja»
Por su parte, si bien la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha avalado el ‘Plan Presupuestario para 2024’ remitido por el Gobierno de España a la Comisión Europea este lunes, ha alertado que 2024 estará predominado por «riesgos a la baja».
En el comunicado, la entidad independiente contempla un crecimiento del PIB real del 2,4% en 2023 y del 2% en 2024, y tilda de «optimista» la previsión de aceleración del consumo privado que hacen desde el Gobierno para el año 2024, que, en opinión del organismo, estará marcado por un declive de la confianza de los consumidores y de endurecimiento de las condiciones de financiación de los hogares.