La farmacéutica catalana Almirall despide a 120 empleados para reducir costes y ampliar beneficio
Es un hecho, no un rumor. Almirall despedirá hasta 121 personas de su plantilla de España, una reducción que es más o menos el 10% del total de empleados. Los analistas consultados por OKDIARIO creen que el objetivo de la catalana es reducir los costes y aumentar el beneficio. Próximamente se pondrá en marcha el proceso colectivo y un comité negociador donde se reunirán compañía y sindicatos.
¿Por qué los despidos? Las firmas de análisis coinciden en afirmar que Almirall busca una reducción de costes y un aumento de los márgenes de beneficio, las cuentas de la catalana llevan estancadas desde 2011. Hace cinco años Almirall conseguía un beneficio de 84,16 millones de euros, un 29% menos que en 2010. Desde entonces las cuentas no han sido demasiado prósperas, es más, en 2015 ganó un 70% menos que en 2014, los beneficios ascendían entonces a 131,8 millones de euros.
Han sido, nuevamente, los empleados los que sufrirán las consecuencias de una gestión que queda indudablemente en entredicho. Según Almirall se hace esta supresión de empleos para “reasignar recursos” para nuevos proyectos y el lanzamiento de nuevos productos.
Y decimos que nuevamente porque los trabajadores no han respirado una tregua desde 2014, año en el que Almirall anunciaba el despido de 250 personas por la caída de las ventas. Finalmente el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) se quedó en un total de 180 personas. Esto en febrero, solo 30 días más tarde, Almirall anunciaba 190 despidos de sus filiales europeas. Pero ahí no quedaba el asunto, en 2015 la compañía de los hermanos Gallardo proclamaba el despido de 59 personas de su área de investigación y desarrollo. En julio de 2014 Almirall vendía su negocio respiratorio a AstraZeneca, con esta operación la catalana se embolsó 1.562 millones de euros y traspasó a la británica un total de 719 empleados.
Con el nuevo ajuste de personal anunciado hoy y el traspaso de trabajadores la reducción de personal en solo dos años ha sido de 1.200 empleados, cuando contaba con una plantilla de más 3.300 personas. «Con estos despidos, la cuestas de la compañía no van a cambiar demasiado, no se van a aliviar los márgenes operativos. Es un cambio de estrategia, bajar costes», explica Borja Rubio, analista de XTB. Esta es la cruz de la moneda, la cara es la de Eduardo Sanchiz, presidente de Almirall, que se subía el sueldo un 6,7% más en 2015 hasta 1,9 millones de euros.
La compañía gestionada por Jorge Gallardo Ballart y Eduardo Sanchiz despedirá a más de 100 personas en nuestro país, una noticia, que por ahora, no ha tenido permeabilidad en su cotización en el MAB. “El valor no está fantástico, pero está manteniendo el tirón. No es un valor que tengamos en cartera, no lo tenemos en radar porque creemos que hay mejores opciones”, desde la casa de análisis.
La catalana ha logrado un beneficio 80,5 millones de euros en los seis primeros meses de este año, un 36,9 % más que en el primer semestre del mismo periodo. Una cuentas que han crecido al calor de su negocio dermatológico y la venta de su filial en México al Grupo Grünenthal por 30 millones de euros. A pesar de las noticias negativas que suponen los despidos, Almirall tira de optimismo y prevé crecer entre el 6% y el 9% este 2016.