Un experto en economía confirma el futuro de las pensiones españolas: «Cada vez más…»
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Cuando el sistema público de pensiones en España fue concebido, las condiciones económicas y sociales eran radicalmente distintas. En sus inicios, la esperanza de vida era considerablemente más baja que en la actualidad, lo que significaba que las personas disfrutaban de sus años de jubilación por menos tiempo. Además, el pleno empleo, el crecimiento constante de los salarios y una economía estable permitían sostener con solvencia este esquema de reparto que sin embargo ya no parece tan viable. Entonces ¿cuál es el futuro de las pensiones?.
Las últimas décadas han transformado el panorama sobre el sistema de pensiones. Hoy en día, España se enfrenta a un envejecimiento acelerado de su población, con una esperanza de vida que ha alcanzado los 85,7 años para las mujeres y 80,4 años para los hombres en 2022. Al mismo tiempo, las tasas de natalidad se han desplomado, reduciendo el número de jóvenes que ingresan al mercado laboral y, por ende, la base de cotizantes que sostiene el sistema. Además, los salarios se mantienen entre los más bajos de Europa Occidental, con una media anual de 27.587 euros, lo que dificulta que los trabajadores actuales acumulen suficientes aportaciones para garantizar pensiones dignas en el futuro. Este desequilibrio amenaza con hacer insostenible el futuro de las pensiones tal y como lo conocemos.
Las advertencias de un experto sobre el futuro de las pensiones
El economista Santiago Niño Becerra ha sido especialmente crítico con el modelo actual. En su análisis, las pensiones públicas están destinadas a experimentar una reducción significativa, llegando incluso a volverse «ridículas» en comparación con los niveles actuales. Según el experto, el problema radica en un modelo económico que ya no responde a las necesidades actuales ni a las capacidades de los Estados modernos.
Niño Becerra ha señalado que, en este contexto el futuro de las pensiones acabará pasando por tener a muchas personas que se verán obligadas a trabajar más allá de la edad de jubilación para complementar sus ingresos, ya que las pensiones no serán suficientes para garantizar una vida digna. Además, ha puesto en duda la capacidad de los fondos privados de pensiones para ofrecer una solución alternativa, ya que su rentabilidad ha disminuido notablemente en los últimos años.
El catedrático también ha destacado un cambio global en la economía, que afecta directamente al futuro de las pensiones. Según su análisis explicado a El Confidencial, el mundo se dirige hacia un modelo en el que la economía ya no estará basada en la abundancia, sino en la administración de la escasez. Este cambio estructural tendrá implicaciones profundas en cómo los Estados gestionan los recursos y en el papel que desempeñan las empresas privadas y los ciudadanos en la financiación de su bienestar.
La ‘hucha de las pensiones’: un recurso insuficiente
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social, conocido como la ‘hucha de las pensiones’, fue creado en la década de los 90 como una solución para garantizar el pago de prestaciones futuras en tiempos de dificultad económica. Sin embargo, este fondo ha sufrido un deterioro significativo, hasta el punto de que sus reservas actuales apenas representan el 0,4% del PIB español.
En comparación, otros países de la OCDE presentan cifras mucho más sólidas: Corea del Sur lidera el ranking con un 46,3% del PIB, seguido de Portugal con un 11,2% y Francia con un 7%. Estas cifras reflejan una gestión más eficaz de los fondos destinados a garantizar las pensiones, mientras que España se enfrenta a la difícil tarea de recuperar y fortalecer este recurso.
Aunque el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) ha contribuido a incrementar ligeramente las reservas en los últimos años, este esfuerzo es insuficiente para hacer frente al crecimiento constante del gasto en pensiones, especialmente en un país donde el envejecimiento de la población sigue en aumento.
Opiniones divididas entre expertos
El debate sobre el futuro de las pensiones en España no se limita a Santiago Niño Becerra. Gonzalo Bernardos, profesor de Economía en la Universidad de Barcelona, también ha señalado que el sistema actual es «demasiado generoso» y, por lo tanto, insostenible. Según Bernardos, mantener el nivel actual de prestaciones pondrá en riesgo las finanzas públicas en las próximas décadas, especialmente si no se implementan reformas que ajusten las cuantías y aumenten progresivamente la edad de jubilación.
En este sentido, Bernardos ha propuesto la necesidad de un equilibrio entre sostenibilidad económica y protección social, algo que, a su juicio, requiere cambios estructurales tanto en el sistema de pensiones como en el modelo laboral.
¿Hacia dónde se dirige el sistema de pensiones?
El futuro de las pensiones en España depende de múltiples factores, desde la evolución del mercado laboral hasta la capacidad de los gobiernos para implementar reformas que garanticen la sostenibilidad del sistema. Entre las medidas que podrían adoptarse se incluyen:
- Incremento de la edad de jubilación efectiva: ajustar la edad de retiro a la realidad demográfica y económica actual.
- Reformas fiscales: incrementar las aportaciones de los trabajadores y empleadores al sistema.
- Fomento del ahorro privado: incentivar planes de pensiones privados más accesibles y rentables.
- Mejor gestión de la ‘hucha de las pensiones’: asegurar que las reservas del Fondo de Reserva se utilicen de manera estratégica y eficiente.
La sostenibilidad del sistema público de pensiones es uno de los mayores retos a los que se enfrenta España en el siglo XXI. Aunque las soluciones no serán fáciles ni rápidas, el debate abierto por expertos como Santiago Niño Becerra y Gonzalo Bernardos subraya la urgencia de abordar este problema con una visión a largo plazo.
La clave estará en encontrar un equilibrio que permita garantizar pensiones dignas para las generaciones futuras sin comprometer la estabilidad económica del país. Lo que queda claro es que las decisiones que se tomen en los próximos años definirán no solo el sistema de pensiones, sino también el modelo de bienestar social en España.