¿Cómo desarrollar una estrategia de marketing de participación?
¿Qué es el marketing de participación? Hace unos años, la publicidad era únicamente unidireccional. Es decir, las empresas emitían su anuncio y el público objetivo lo recibía sin ofrecer una respuesta a ello. Con la aparición de las nuevas tecnologías y las redes sociales, ha habido un radical cambio de paradigma: ahora, el consumidor, al recibir la información, tiene la capacidad de ofrecer una respuesta sobre si aquello que ha recibido es o no de su agrado.
Del mismo modo, puede manifestar si concuerda con sus valores y si la imagen que transmite la empresa es la que espera de ella. Como hemos visto, por lo tanto, el cliente quiere participar y dar su opinión, transmitir un feedback. De esta idea nace el llamado marketing de participación. Son un conjunto de estrategias que la empresa emprende con la finalidad de recibir una respuesta por parte de su público objetivo y generar una conexión entre ellos y la compañía, y entre los mismos consumidores mismo.
Estrategia de marketing de participación
Los puntos que toda empresa debe de ser capaz de fijar para que el marketing de participación sea efectivo son los siguientes:
- Trabajar de forma intensiva las redes sociales: las redes son el espacio de interactuación por excelencia entre la empresa y su público. Para ello, hay que tenerlas actualizadas y favorecer la participación.
- Posibilidad de ofrecer algún beneficio a cambio de la participación: los incentivos son una pieza clave en toda estrategia. Para fomentar la participación, pues, la empresa puede publicitar sorteos, promociones o fijar espacios abiertos de opinión. En este último caso, hay que estar muy atentos y responder posibles objeciones enseguida.
- Ofrecer información más allá del propio producto que interese al público: quien participa en una red social tiene un interés en el producto que va más allá de sus propios atributos. Querrá, también, estar informado de las novedades en el sector y conocer curiosidades sobre aquello que colma sus necesidades.
- Potenciar la imagen de marca y vincularla a unos valores compartidos: se ha comentado en otras ocasiones: en un mercado competitivo, transmitir una imagen de acuerdo con los valores compartidos por la mayoría de clientes es un factor clave de fidelización.
- Promover la creación de una comunidad de usuarios: encontrar personas con preferencias similares es uno de los motivos que llevan a los usuarios a interactuar en las redes y otros espacios. Para facilitarlo, la empresa debe de instaurar esta comunidad y vincularla a ella.
- Segmentar el público de acuerdo con sus necesidades específicas: el conocimiento de las necesidades y preferencias del público objetivo determina, también, el éxito. Puede que una parte del público objetivo presente unas especificidades que no se acaban de colmar con el producto genérico. En este caso, hay que determinar qué puntos colmarían sus necesidades y darlos a conocer para disponer de un mercado específico y más fidelizado.