CEOE intentó salvar Fitur del boicot del taxi pidiendo a Garrido más control para frenar a los VTC
La patronal madrileña CEIM defendió al taxi en la Comunidad de Madrid al defender su exigencia de una hora de precontratación mínima para los vehículos con licencias de VTC.
Madrid, doce y media de la madrugada del 23 de enero, apenas una horas antes del arranque oficial de Fitur, la feria más importante del año en la capital. Un grupo de negociadores del sector del taxi se dirige de urgencia a una sede de la Comunidad de Madrid en la calle Maudes, convocados in extremis por el ejecutivo de Ángel Garrido.
Apenas unas horas antes, la Generalitat de Cataluña ha ofrecido a los taxistas de Barcelona una hora de precontratación para Uber y Cabify, si bien tan sólo les blinda 15 minutos mientras que los otros 45 tienen que desarrollarse legislativamente. Los portavoces de las VTC en Barcelona han dicho que se marcharán de la ciudad si esa ley se aprueba.
Los taxistas fueron a CEIM a las 12 del mediodía de este martes y solicitaron a la patronal intermediar con la Comunidad de Madrid. Desde CEIM, representada por su presidente Juan Pablo Lázaro, se pidió a la Comunidad que se aviniera a las peticiones de los negociadores taxistas formados por Gremial del Taxi, la Federación Profesional, la Plataforma Caracol y Élite Taxi: precontratación de hasta una hora más carrera mínima de cinco kilómetros más imposibilidad de aparcar en superficie más otros requisitos técnicos.
En concreto, según la Asociación Gremial de Madrid, CEIM pidió 30 minutos de precontratacion a la Comunidad de Madrid que fueran ampliables a una hora por los ayuntamientos y que no puedan aparcar en superficie ni circular más de 30 min en vacío.
Esta intermediación de la patronal se antojaba definitiva dada su cercanía con el gobierno regional del PP. Sin embargo, no sirvió: la consejera de Transporte Rosalía Gonzalo recordó que es el ministro de Fomento José Luis Ábalos quien tiene que enmendar su propio real decreto presentado en octubre para definir una precontratación obligatoria de 15 minutos. En la reunión de madrugada con los taxistas en Maudes, Gonzalo ofreció «el mismo texto que el lunes», que no recoge ninguna precontratación, según aseguran fuentes presentes en la misma.
Barcelona cambia el destino de Madrid
Sin embargo, el liderazgo en las negociaciones se está llevando en Cataluña, pues es allí donde está el empuje carismático de Tito Álvarez (representante de Elite Taxi) y el mayor apoyo político por parte de Ada Colau. Cuando en la Plaça Sant Jaume se rompe la baraja pasadas las 8 de la tarde del martes y se niega a ceder a las exigencias de los taxistas, estableciendo una precontratación de solo 15 minutos frente a la hora de mínimo que exigen los taxis -tal y como habían propuesto en su decreto ley del pasado viernes- las noticias llegan rápidamente a Madrid donde la postura mayoritaria es clara: se exige lo mismo por lo que luchan los catalanes. Se sigue la huelga igual hasta que todos consigan las mismas condiciones.
De este modo, la situación está ahora mismo más enconada que nunca y sin visos de tener fácil solución. En Cataluña, el Govern tirará adelante sí o sí con una ley que hará abandonar a Uber y Cabify si cumplen su promesa. En la Villa y Corte no se quiere recorrer ese camino y los taxistas -menos radicales en estos años pasados que en la Ciudad Condal- están decididos a seguir con unas movilizaciones que este miércoles han boicoteado la Fitur, la feria empresarial más importante que acoge Madrid hasta el punto de forzar al Jefe del Estado a entrar a por una puerta lateral.