McLaren vende optimismo: “Vamos a tener un coche de carreras de verdad”
Un gigante dormido. Eso es McLaren desde que en 2013 entrasen en una espiral negativa que acabó con el divorcio con Honda después de tres años a cada cual más decepcionante. De esta forma, la de 2018 es vista en Woking como la temporada de la redención. La llegada de Renault debería catapultar al buen chasis británico hasta los primeros lugares de la parrilla. ¿Tanto como para ganar carreras? Ahí está la gran duda. No obstante, desde el seno de la escudería son algo más prudentes, y apuntan al podio como un objetivo más realista, sin querer lanzar campanas al vuelo antes de tiempo.
“Somos uno de los grandes equipos, pero no hemos establecido expectativas porque puede ser peligroso. Puedo prometer que lo haremos mejor, esperamos desafiar a los de delante. Creo que vamos a competir en un coche de carreras de verdad, creo que vamos a ver a Alonso y Vandoorne compitiendo duro entre ellos, lo que será emocionante siempre y cuando no se echen el uno al otro fuera y, con suerte, estaremos luchando por podios. Espero que ese sea el primer paso”, afirma Zak Brown, CEO de McLaren.
Para lograr este objetivo, McLaren se va a enfrentar a las tres fuerzas dominantes actuales de la Fórmula 1, Mercedes, Ferrari y Red Bull. Especialmente interesante va a ser la comparación con los energéticos, ya que el compartir motor les convertirá en la referencia más válida para comprobar el verdadero rendimiento del equipo de Alonso. En McLaren son conscientes de la dificultad del objetivo, como reconoce el propio Brown. “Son equipos increíbles, pero vamos a perseguirlos con fuerza y espero que podamos rociar un poco de champán”.